Las cimarronas del país tienen una sonora razón para estar contentas: su música fue declarada patrimonio cultural inmaterial del país.
Así lo dice el decreto ejecutivo 43302-C, publicado en La Gaceta de este 19 de enero, y que tiene sonando las trompetas y los redoblantes del gremio.
Juan José Carazo Bolaños, del Movimiento Santo Domingo Cuna de la Cimarrona, dijo que están muy alegres de contar con esta protección cultural después de años de lucha.
“Por mucho tiempo las cimarronas fueron menospreciadas y casi desaparecen a finales de los años noventa y principios de los dos mil. Nosotros emprendimos una labor importante en Santo Domingo para retomar esto y tuvo un impacto en otras partes del país; por dicha, con la declaratoria ya tenemos una protección, ya no somos el grupito empírico, desafinado que no sabía tocar y fue menospreciado hasta por músicos profesionales; ya eso pasó, estamos protegidos y tenemos esta denominación muy merecida”, dijo Carazo.
En el documento se señaló a comunidades como Santo Domingo y Barva, en Heredia; Palmares, en Alajuela; Tres Ríos, Pacayas, San Isidro de El Guarco y Juan Viñas, en Cartago; Liberia, Cañas y Nicoya, en Guanacaste; Esparza en Puntarenas; Aserrí, Ciudad Colón, Escazú y Santa Ana, en San José, como cunas de la música de cimarrona.
Música para todos
Alguien que le dará con más entusiasmo al bombo junto a su cimarrona Cimalokera Alajuela es Diego Leal, quien dijo estar muy feliz con la noticia porque demuestra que la música que ellos tocan, más que un vacilón, es cultural.
Esta cimarrona, fundada en 2006 y que cuenta con seis músicos, grabó un disco llamado “Hay turnos en la vida”, que contiene 14 temas de música tradicional y popular. Además cuentan con un tema parrandera original llamado “Chilillo del diablo”, con el que han demostrado que la música de cimarrona también se puede comercializar.
“(El decreto) Es muy importante tanto para las cimarronas como para el país, ya que con este se le da la importancia que se le tiene que dar a la música tradicional de cimarrona. Ojalá sea un puente para valorar tanto la música como todas las tradiciones costarricenses”, dijo Leal.
El músico añadió que algo muy bonito es que este tipo de música le gusta a toda la familia y pone a bailar a grandes y a niños.
Los datos de la investigación con la que se sustentó la declaratoria fueron dados por músicos de Santo Domingo, una de las zonas donde más hay cimarronas y todas gozan de buena salud.