Diego Bravo le sigue echando leña al fuego y habló sin pelos en la lengua sobre el programa Mira quién baila, el cual terminó a inicios de diciembre.
“Me gustó mucho verte en Mira quién baila”, le escribió una de sus seguidoras en Instagram, por lo que el creador de contenido contestó inmediatamente.
“Hubo momentos donde me quise desvanecer en el programa, pero pensaba en la gente que veía el programa, en los que me apoyaron, y eso fue lo que me mantuvo ahí, y no quería fallarles”, inició diciendo.
Bravo expresó que él hizo lo que pudo con su pareja de baile Yessenia Reyes, además detalló que ingresó al programa a pasarla bien y entretener al público.
“Yo no entré al programa con el afán de hacer alguna polémica, chisme, eso nunca lo hice. Ni de mis compañeros, ni de la producción, ni del canal, ni mucho menos”, agregó.
El polémico youtuber dijo que con la controversia al final, donde Lynda Díaz renunció, explicó que solo existe una versión de la cual él nunca ha querido salir a hablar al respecto, porque mientras estuvo en el formato conoció muy buenas personas.
“Conocí buenas personas, pero también me di cuenta de que hay gente que es muy mala. Hay gente que con tal de querer demostrar superioridad y poder, es capaz de decir y hacer lo que sea y eso quedó demostrado. Yo me di cuenta de eso”, continuó diciendo.
Diego además dijo que lo que pasó al final no fue lo mejor para él o la gente que lo sigue, pero eso era lo único que había.
“Aunque me intentaron traer abajo, y aunque se dijo una y otra cosa para querer golpear mi ego y mis emociones, no se logró, lo que de pronto alguna persona quería”, detalló.
El exparticipante del programa confesó que siempre se mantuvo al pie del cañón con firmeza y cumpliendo con las cosas que le pedía el canal, sin importar lo que dijeran los demás.
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“Al final de cuentas, en una historia siempre hay dos versiones y, es muy fácil sentarse a hablar sin pruebas. Yo aprendí que hay gente mala y también muchas cosas buenas, pero lo más importante fue aprender a lidiar con gente perdedora y con gente que realmente tiene poca cosa en su vida y es tan pobre de corazón, que tiene que alimentarla con otras cosas”, concluyó tirando la pedrada.
En cuanto a la relación con otros compañeros, expresó que siempre tuvo una linda relación con la mayoría, incluyendo jueces, periodistas y personal de producción.
“También fui confidente de muchos y siempre supimos separar la manzana podrida del canasto”, concluyó.
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Recordemos que Bravo tuvo algunos roces con Lynda Díaz y el bailarín Michael Rubí, después de que los culparan a él y a Reyes de unas conversaciones que fueron expuestas al ojo público.