Corea del norte tiene un presidente polémico, violento y según se cuenta es un gran sátiro, ya que tiene un harem conformado por niñas de 13 años, quienes forman su “Escuadrón del placer”.
Las jovencitas se tienen que se someter a un test que compruebe su virginidad. Las niñas son destinadas a complacer al líder supremo Kim Jong-un y a sus allegados.
Según cuenta Infobae, esta enferma tradición, creación de su abuelo Kim Il-sung y mantenida a lo largo de los años hasta el fallecimiento de su padre, Kim Jong-il en el 2011, fue resucitada por el actual dictador hace apenas 5 años.
Detrás de los muros de sus palacios ultraprotegidos, se sospecha que Kim Jong-un se resguarda y desaparece de la escena algunas semanas. Mientras el mundo especula con su muerte, el dictador y otros funcionarios de alto rango se estarían allí aprovechándose de su poder con su harem.
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Se dice que está formado por unas 2.000 niñas tiene diferentes funciones que incluyen no solo cantar y bailar para la élite de la nación, sino también participar en extraños juegos sexuales y orgías.
Las niñas son sacadas directamente de las escuelas y obligadas a ejercer el trabajo sexual. Los desertores de Corea del Norte aseguran que deben someterse a exámenes médicos invasivos para demostrar que son vírgenes al ser reclutadas.
Añales.
La espantosa práctica comenzó durante el reinado del fundador de Corea del Norte, Kim Il-sung, quien todavía es considerado el presidente eterno del país, a pesar de haber fallecido en 1994.
Hacia fines de la década de 1970, envió a sus funcionarios a recorrer la nación en busca de las jóvenes y niñas más atractivas para actuar como cantantes y bailarinas.
Algunas de ellas también comenzaron a trabajar como sirvientas, pero a las más atractivas se les ordenó convertirse en “mujeres de consuelo” para funcionarios poderosos. Muchas de estas niñas tenían entre 13 y 14 años y en ocasiones eran ofrecidas por sus propias escuelas para el servicio.
Kim Il-sung apuntó específicamente a las vírgenes porque creía que tener relaciones sexuales con ellas le permitía absorber el “ki” o la fuerza vital de una niña. Las autoridades les dirían a los padres de las niñas que sus hijas estaban siendo llevadas a una importante misión para servir a Kim Il-sung. Sus familias debían aceptarlo por no tener voz en la decisión.
Los oficiales del ejército de Corea del Norte a menudo tomaban a las mujeres como esposas después de que eran “retiradas” de sus deberes sexuales a los 20 años.
Una vez incorporadas al “escuadrón”, las niñas serían clasificadas en diferentes unidades. Una de canto y baile, otra de masajes donde hasta incluso serían enviadas al extranjero para su formación. Y finalmente una última unidad, llamada Manjokjo, que tendrían la tarea explícita de brindar servicios sexuales.
Después de la muerte de Kim Il-sung, su hijo, Kim Jong-il, mantuvo la práctica y tuvo una serie de amantes.
En el 2010, una mujer conocida como Mi Hyang desertó a Corea del Sur, alegando haber estado en “escuadrón del placer” de Kim Il-sung. Dijo que fue reclutada a los 15 años.
“Me preguntaron si alguna vez me había acostado con un niño. Me sentí muy avergonzada de escuchar esa pregunta”. Mi Hyang pasó dos años en el harem.
Lee Il-nam, el sobrino de Kim Il-sung, mencionó el tema en una memoria que publicó antes de ser asesinado en 1997. Describió imágenes de fiestas salvajes en la residencia de Kim Jong-il, en Pyongyang, que duraban hasta las primeras horas de la mañana.
“La rutina en las fiestas incluía comer, beber y bailar, pero generalmente terminaba con juegos eróticos”, escribió.
En 2015, surgieron informes en Corea del Sur de que Kim Jong-un estaba a la caza de reclutar nuevas niñas y mujeres altas y muy atractivas para un nuevo “escuadrón del placer” completamente propio, algo que a la fecha se mantiene vigente.