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Daniel Vargas ya se encuentra cerca del monte Everest, sin embargo, el famoso chef ha demostrado que su travesía no es “color de rosa”.
El guapo deportista había mostrado a través de sus redes sociales una de las duras realidades a las que le tiene que hacer frente, y es que, al amanecer, todo amanece congelado.
“Estas son las toallitas, están completamente congeladas, igual el agua. En la noche la temperatura llega entre -10 y -15 grados”, comentó.
Debido a este frío extremo, Dani la ha visto “fea”, incluso se las ha tenido que ingeniar para poder hacer una de sus necesidades.
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“Vean otro dato curioso: en la noche y en la madrugada hace tanto frío que salir de la tienda a orinar es una muy mala idea. Ustedes se van a morir de risa, pero uno tiene que orinar en una botella y tenerla a la par de la cama para cuando a uno le den ganas de orinar, ya sea en la mañana o la madrugada”, comentó.
Al creador de contenido y exparticipante de Dancing With Stars, le hizo gracia contar ese dato curioso, pero sabe que no le queda de otra por las bajas temperaturas.
Recordemos que el querido chef desde hace meses se prepara para cumplir un único objetivo clave: ser el tico más joven en escalar la montaña más alta del mundo, pero las condiciones extremas a las que se enfrentan no dejan de impresionarlo.
