Cristiana Nassar regresó al redondel de Zapote después de muchos años, pero con una misión muy especial: llevarle alegría y un regalo a una familia costarricense.

La presentadora forma parte del equipo que armaron canal 13 y canal ¡Opa! para las transmisiones de las corridas de toros de este fin y principio de año.

En el 2013 fue la última vez que ella estuvo en este redondel josefino luego que dijera al aire “se despanochó”, cuando formaba parte del elenco de canal 7, luego que una mujer se cayera en un juego mecánico.

Por primera vez la Macha no está en el palco de transmisión principal sino que le encomendaron la misión de visitar un hogar distinto en cada corrida de las 3 p. m. y 8 p. m.

Ella estuvo muchos años trabajando para las transmisiones de Teletica, Repretel y Multimedios. Con esta última televisora estuvo en las corridas toros desde Pedregal los últimos años.

“Estoy muy contenta porque ir a Zapote es como la fiesta grande para mí, o sea Zapote es el escenario más grande que hay en el país para esta locura de los toros, entonces es divino, por la gente que uno se topa, el saludar a la gente que está en las filas, toda esa parte me fascina”, dijo la presentadora.

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Mucho sentimiento

La presentadora del espacio “No tan Cristiana”, de canal 38, dice estar muy emocionada con su nueva función dentro de estas transmisiones de fin y principio de año porque le va a permitir conocer gente muy linda y lo más bonito es que les llevará una sorpresa completamente en vivo.

“Es bonito entrar a las casas, saludar a la gente, hacer el vacilón y además llevarles un regalito, eso es muy bonito. Esta fue una iniciativa del productor Erick Madrigal y yo encantada que me eligieran para llevar alegría a las familias en las 28 corridas que tendremos”, aseguró Nassar.

En cuanto a la unión que hizo canal 13 con ¡Opa! este año dijo que la parecía una “genialidad” porque no cualquiera acoge con cariño un medio que apenas va surgiendo.

Además, confesó que desde que falleció su esposo, Martín Nassar, en febrero de 2021, pensó que iba a pasar mucho tiempo para volver a hacer de las suyas en unas corridas de toros, pero que este año no pudo decir que no al ver que su participación sería más tranquila.

“Tengo una mezcla terrible de sentimientos porque durante 20 años hice toros y ese era mi trabajo siempre en diciembre, estar en el palco de transmisión de todos los canales, y quién se beneficiaba de eso era mi marido que amaba los toros, pero sobre todo, amaba escucharme y disfrutaba a mil, entonces es muy extraño. Lejos de estar él solo y yo sola, las transmisiones nos unían montones porque al otro día en la mañana cuando nos veíamos nos moríamos de la risa de las tonteras y de las cosas divertidas que pasaron en la corrida, entonces el que él no esté es muy complicado para mí”, confesó la presentadora.

Los dos últimos diciembres Cristiana lo que hizo fue irse de viaje fuera del país con su hija para vivir su luto y evitar recordar lo mucho que a su esposo le gustaba verla en la pantalla en esta época.