Cada gala de Tu cara me suena (TCMS) representa todo un reto no solo para los diez participantes sino también para el equipo de maquillistas, peluqueros y vestuaristas de Teletica, quienes todos los domingos son los que más corren porque cada transformación quede perfecta.

Cada maquillista debe preparar a dos de los participantes y además encargarse de dejar bien guapos a los presentadores, jueces y bailarines. Es decir, su trabajo no es jugando.

Conversamos con varios de ellos para conocer cuánto tiempo se tardan en hacer magia en camerinos y cómo logran transformar los rasgos de un hombre en el de una mujer y viceversa.

Alejandra González, quien tiene más de 17 años trabajando en canal 7, contó que primero la producción del programa les manda al grupo de maquillistas (son seis) el video que cada participante va a imitar y que entre ellos definen las dos que hará cada una.

Después les toca estudiar al artista para ver sus rasgos y características de la cara para luego tratar de calcarlas a punta de brochazos y pinturas.

“Comparamos a la persona con las imágenes del video o por lo menos investigamos de una edad parecida del cantante para poder acoplarlos y hacer el personaje como tal. Pegamos en una hoja la mitad de la cara del artista con la del participante y ahí vamos comparando donde hay que aclararle, si hay que ponerle barba hasta dónde, si tiene lunares, que sean iguales las cejas, hasta dónde les llega el cabello, son muchos los detalles”, explicó González.

Su compañera Mónica Hernández, quien ha trabajado también en todas las temporadas de TCMS, contó que mínimo se tardan de una a dos horas en cada transformación y que ahora solo se están basando en la técnica del maquillaje de claros y oscuros.

“A veces los bigotes se les hace pelo a pelo, se corta pelito y se les pega para que se vea natural, no se pinta. Es un reto muy grande pero a la vez un poco fantasioso cambiar a una persona como es a tratar de que se vea lo más parecido posible al personaje que le toca”, dijo Hernández.

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Nada de prótesis

Semanas atrás todo el equipo recibió una capacitación por parte de la maquillista española Raquel González, directora de caracterización del TCMS de España, porque en esta ocasión no están usando prótesis para moldear las narices, los mentones y pómulos.

En otras temporadas usaban prótesis de látex o otros materiales para que la caracterización se asemejara más; sin embargo, este les terminaba dando más trabajo debido a que a los participantes se les caía cuando sudaban después de cada presentación.

Priscilla Corrales, quien es la coordinadora del departamento y tiene 27 años en Teletica, contó que esta técnica la usaron desde la primera temporada, luego de ser capacitados por un chileno, pero que ahora es a pura brocha y polvos.

“Antes se les ponía cachetes, nariz, mentón, todo con prótesis y ahora utilizamos más el formato de España que es más maquillaje, es un toque más suave, porque con las prótesis era muchas horas, se despegaba con el sudor, las prótesis pesaban, era una pesadilla, entonces con este formato es un poco más fácil”, explicó.

La experta en belleza además contó que las caracterizaciones las empiezan a hacer a la 1 p.m., aunque desde temprano están trabajando con cada participante porque a las 9 a.m. se graban las entrevistas antes de que suban al elevador de transformación.

Por su parte, Paula Agüero, quien tiene 23 años en el canal de La Sabana, contó que para ellos la caracterización es más fácil cuando el personaje tiene más elementos, como barba, porque así logran ocultar más las facciones del participante.

“Si un personaje tiene más elementos como decir: pestañas o barba, podemos acercarlo más al personaje, como en este caso se va a hacer al Buki, tiene peluca larga, tiene barba, entonces se pierde más la cara de Rosibel (Carvajal), entonces cuando no tienen nada ahí se usa mucho claro-oscuro pero es más trabajo porque hay que perder a la persona”, explicó.

Paula asegura que de momento los que más le han dado lata para cambiar sus facciones han sido René Barboza y Flor Urbina, mientras que ha sido más fácil maquillar a Luis Montalbert y a Ramzii, más si les tocaba cambio de género.

“Es muy bonito porque es cambiar de lo que hacemos diariamente de maquillaje de belleza a esto que es muy retador y estresante, pero también es muy bonita la experiencia”, agregó Priscilla Corrales.

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Más corre corre

Otra que pase corriendo todo el día previo al inicio del programa y desde días antes de cada gala es la vestuarista Sandra Carvajal.

Ella es la que se encarga de hacer que el vestuario de cada participante sea igual o similar al del cantante y en muchas ocasiones hasta le toca ponerse de creativa y hacer algunos detalles con sus manos.

“Yo tengo un equipo de colaboradores que cosen y confeccionan las cosas de acuerdo a las indicaciones que les doy y, por ejemplo, conseguir los zapatos cuesta mucho, yo paso pintando zapatos. Las tenis de Alita (Salazar) se las pinté anaranjadas, por el piecito de Rosibel (Carvajal) no encontraba la bota adecuada y también las pinté, los pantalones de Ricky Martín y los bailarines todo fue hecho a mano”, contó la vestuarista.