Nicole “Coco” Roper acaba de lanzar su libro “Mírame”, en el que cuenta sobre su vida familiar y su enfermedad.
Ella también habló de este tema con La Teja desde la intimidad de su hogar en Texas, Estados Unidos, así como de la relación con el padre de su hija.
La entrevista nos la dio un día antes de su riesgosa operación, donde le taparían la uretra para dejar de orinar vaginalmente; sin embargo, el procedimiento no se lo pudieron hacer completo.
Según informó, próximamente volverá al hospital a intentar esta cirugía de nuevo.
A continuación, la tercera y última parte de la entrevista que nos brindó este 2 de julio.
- ¿Cómo es actualmente su relación con su esposo?
Vivimos separados, pero dentro de la misma casa. Es un poco complicado. Una de las promesas que mi esposo me hizo cuando me enfermé fue: ‘yo no me voy a divorciar, nos vamos a quedar hasta que sepamos qué vamos a hacer con Ellie y que sea lo mejor para todos. Al yo no tener familia aquí y tampoco querer separar al papá de mi hija, hemos tomado la decisión de quedarnos juntos bajo la misma casa, pero románticamente no hay una relación. Simplemente seguimos siendo papás separados, pero juntos, creciendo a Ellie juntos, compartimos responsabilidades y nos compartimos como los gastos de la casa y financieramente todo está separado.
Yo no puedo vivir sola con Ellie porque mi salud es muy impredecible. Una vez me desmayé aquí en la casa, me golpeé la cabeza y no había nadie más que Ellie y cuando me levanté estaba Ellie en una esquina gritando y llorando y yo dije: ‘nunca más en mi vida’, y pagar una nani (niñera) de dos mil dólares al mes (poco más de un millón de colones) no es como muy viable, es muchísima plata.
- ¿Pero tienen una relación cordial?
Ah sí, sí. Muy cordial. Yo creo que ya el haber sanado tantos dolores y cosas sí es cordial. Creo que a veces no es lo más fácil del planeta vivir con tu ex bajo el mismo techo, entonces a veces sí hay discusiones como cualquier tipo de relación y amistad, pero sí, en esta casa se vive con mucha paz.
- ¿Es un buen papá?
Es un excelente papá. Al principio no lo fue, pero yo me quito el sombrero con ese hombre como papá, es un excelente papá.
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- Hablemos del libro, ¿qué fue el momento o la situación que la llevó a escribir el libro?
Toda la vida la gente me dijo: “mae, Coco, su vida es un libro, tiene que escribir un libro”, y yo sabía que mi vida era un libro, pero nunca tuve las agallas para decir: “ok, voy a escribir todas las cosas que he hecho”, porque en este libro la persona que más tiene que ponerse en el fuego soy yo, no voy a ponerme a contar mi historia sin contar mis errores y también cuál era el final en ese momento.
Cuando yo empiezo a ver la fortaleza, mis propias seguidoras empezaron a decir: “mae, Coco si usted escribe un libro yo me lo leería”, y había escrito a través de mi proceso de sanación en el hospital cinco cuadernos, páginas y páginas de escribir historias, cartas de perdón, cartas de oración, mi sanamiento en papel, y dije: “ya está escrito la mitad del libro, ya sé cuál es el propósito, hagámoslo”.
Lo escribí en una agenda como uno de mis sueños y después empecé a trabajar con una chica, como escribir y seis meses después de empezar ese trabajo una amiga me llamó y me dijo: “conozco a la agente de una publicadora en Estados Unidos, le conté su historia, vio tu Instagram, quiere escribir un libro”, pero después ella me robó 28 mil dólares y después encontré a alguien más y empecé a escribir el libro en cuatro meses.
- ¿Qué fue lo más duro que le tocó escribir?
Mi abuso es fuerte, mi abuso es muy fuerte, pero mi abuso no fue tanto solo escrito, yo tengo una chica que me ayudó e hice un audiovoz. Ella me mandó una serie de preguntas porque lo tratamos de hacer por video y no me sentía cómoda. Eso fue como lo más difícil de hablar, leer, editar, ya lo leo y ya no lloro, entonces siento como un gane, pero lo más difícil fueron las metidas de pata con las que tenía vergüenza, con las que yo decía: “mae, la gente no me va a ver bien”, la gente va a decir: “¿cómo esa niña hizo eso?, que malagradecida”, ese miedo también de mi familia, como ese, “mae, ¿qué van a sentir ellos de que yo esté hablando de esto?”, hay cosas que ellos tan siquiera sabían y hay otras que no están. Yo creo que podría escribir otro libro.
Acá puede comprarlo |
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El libro de Coco Roper los puede comprar por medio de su Instagram (@iamcocostrong) y por el WhatsApp 7062-8690. |
- Nos puede contar una de esas metidas de pata de las que habla...
Hablo mucho acerca de mi adicción y mis problemas con el alcohol, habla acerca de ser infiel, acerca de hacer drogas, acerca de robarle plata a mis papás para poder consumir drogas, manejar borracha con mi hija cuando tenía meses de bebé. Cosas que no son fáciles, errores que uno hace, pero, ¿cuál era el punto de escribir un libro solamente con lo bueno que he hecho? eso no es verdaderamente decir que me miren a mí, ese es el punto que yo ya no soy esa persona, he visto un crecimiento, que hay un cambio, a pesar de todas las cosas malas que he hecho.
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- ¿Cuando terminó el libro pudo perdonarse?
Sí, vieras que no justo cuando lo terminé, pero sí tuve una conversación con mi editor adonde ella me dijo: “este es el momento en el que ya no tiene que pensar que usted es mala, es suficiente, que usted es tortera, que todo lo que le han dicho y lo que ha sentido, por tus propias acciones también, ya no existen. Usted tiene que enfocarse en lo que usted es como mujer el día de hoy”.
A veces es difícil porque hay de esos comentarios que te recuerdan que a lo mejor no es lo que eres, pero sí, finalmente hay un perdón y una aceptación de quién soy.
El libro de Coco Roper lo puede comprar por medio de su Instagram (@iamcocostrong) y por el WhatsApp 7062-8690.