El cantante Gerson Solís se dio a conocer a nivel nacional el año pasado tras participar en el programa La Voz México, de TV Azteca.

Su sueño siempre ha sido triunfar en ese país, pero ahora está deseando regresar a la tierra que lo vio nacer.

El sancarleño tiene dos años y tres meses de vivir en Ciudad de México junto a su novia Karina Bolaños, quien también es costarricense. Como muchos ticos que residen en el extranjero, su anhelo es terminar de pasar esta cuarentena por el coronavirus junto a su familia.

Especialmente quiere estar al lado de su padre, a quien le harán un trasplante a mediados de junio y no quiere estar tan lejos de él en estos duros momentos.

La única opción que se ha encontrado para poder regresar es un vuelo humanitario promovido por la embajada de Costa Rica en ese país para este 15 de mayo, el cual, según nos contó, cuesta casi el triple del valor normal de un boleto hacia Tiquicia. Algo que los tiene muy molestos, no solo a ellos, sino a varios ticos.

Gerson asegura que un boleto normal de ida ronda los 90 mil colones por persona, pero que si desea viajar esta vez deberá desembolsar más de 250 mil colones por cada tiquete.

“Contactamos con la embajada para ver cuál era el costo y nos dimos cuenta que ese vuelo de rescate, que para mí la palabra rescate no calza en ningún lado, está en 475 dólares solo el vuelo de ida, o sea, nosotros necesitaríamos más de 900 dólares para que el Gobierno de Costa Rica nos rescate”, dijo.

Le parece injusto

El artista considera que no es justo que las aerolíneas se estén valiendo de la situación actual para elevar los costos sin pensar en que a muchas familias ya no les alcanza el dinero ni para comer.

Desde hace dos meses Gerson y su novia se quedaron sin trabajo tras la suspensión de los eventos artísticos en México. Karina se dedica al modelaje y a la grabación de comerciales, mientras que él vive de la música y de participar en espacios como La Voz.

Ahora su mayor preocupación es cuánto tiempo más deberán esperar para poder regresar a San Carlos pues el dinero que tienen no les alcanza para lograr un cupo en ese vuelo de rescate.

“Tenemos varios amigos ticos que son actores y que también querían irse, pero con ese tipo de cotización de vuelos es imposible. Yo solo quiero un avión para regresar a mi casa y no comprendo cómo se ponen a cobrar de esta forma. A mí se me hace algo injusto”, recalcó.

El cantante contó que de momento él y su pareja están viviendo de algunos ahorros que tenían y del dinero que les han sus padres mientras consiguen cómo venirse.

El pasado martes arribó al país uno de esos vuelos humanitarios, en este caso de Iberia, procedente de Madrid, España, con 290 costarricenses provenientes de 18 distintos países europeos, quienes también debieron pagar sus boletos y desembolsar más de la cuenta para poder regresar.

El Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto había anunciado que no cuenta recursos financieros para costear boletos de avión, algo que pueden hacer solamente en casos realmente de “vulnerabilidad” y luego de rigurosos estudios.

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Con miedo de contagio

El cantante sancarleño, de 25 años, mencionó que lo primero que prohibieron con la propagación del coronavirus en México fueron los eventos artísticos y, según les han dicho, será lo último que se reactivará cuando pase la emergencia.

Por esa razón, por más que quieren seguirla pulseando en la tierra del mariachi haciendo lo que más les gusta, deberán esperar mucho tiempo, pero a estas alturas el dinero escasea. Por eso, su plan es venirse al país y tratar de regresar cuando ya todo se normalice y les reanuden sus contractos.

Otro punto que lo tiene muy preocupado es que asegura que muchos mexicanos no se están tomando tan en serio las medidas sanitarias implementadas por el gobierno y temen llegar a contagiarse.

Al este miércoles 13 de mayo, se habían registrado más de 38 mil casos confirmados por coronavirus y 3.900 muertos en México.

“Si estamos acá es porque México es muy fuerte en arte, en música, muy fuerte en actuación, pero todo eso fue lo primero que se pausó y eso va a hacer lo último que se va a reanudar. Costa Rica va muchísimo más avanzado en afrontar el coronavirus, aquí estamos en fase 3 y esto sigue fatal, la gente ni se cuida ni anda tapabocas, nosotros pasamos encerrados porque nos da miedo”, dijo.

Gerson recalcó que su deseo es que las aerolíneas se pongan el corazón en la mano y que cuando se reabran las fronteras en el país, el próximo 15 de junio, no les dé por aumentar el precio de los tiquetes como ahora, para que tanto ellos, como el montón de ticos que viven afuera, puedan regresar a estar con sus familias.