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El periodista Camilo Rodríguez se quedaría con las ganas de luchar para suceder a su colega Carlos Alvarado como presidente de Costa Rica.
Esto debido a que el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) rechazó la candidatura presidencial del comunicador, quien aspiraba al puesto por el partido Renovación Costarricense, según informó el periódico La Nación.
“Se deniegan las candidaturas para los puestos de presidente y vicepresidencias, presentadas por el partido Renovación Costarricense”, indicó la Dirección de Registro Electoral del TSE este 27 de octubre en la resolución PIC-0101-P-2021.
La Nación también reveló que, en otra resolución, el Tribunal rechazó las candidaturas de los primeros cuatro puestos de diputados por San José, una lista que encabezaba Camilo.
Según dicho medio, un documento emitido por el órgano electoral explica que en el momento en que Renovación Costarricense celebró su asamblea nacional para elegir candidatos, el 2 de octubre, “los delegados carecían de un nombramiento válido, al haber acaecido el vencimiento de la vigencia de sus nombramientos”.
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Eso sí, el periodista todavía tiene una esperanza, pues la resolución de la Dirección de Registro Electoral aún puede ser apelada en un plazo de tres días hábiles, es decir, tiene chance hasta el próximo 2 de noviembre para hacerlo. ¡A correr se ha dicho!
“En las elecciones presidenciales y legislativas, por celebrarse en febrero de 2022, solo podrán participar, individualmente o en coalición, los partidos inscritos que, al momento de completar sus procesos de designación de candidaturas, tuvieran sus estructuras internas y autoridades partidarias vigentes.
“En virtud de lo anterior, se logra determinar que al momento de realizar la designación y ratificación de sus candidaturas, el partido de cita no se encontraba con sus estructuras vigentes”, agregó el Tribunal.
De momento, ni el candidato ni el partido han hecho referencia a la decisión tomada por el TSE.
El periodista estaba acompañado en la papeleta con Berta Cristina Elizondo Valverde y Mario Alberto Rodríguez Bonilla, quienes eran candidatos a vicepresidentes.
Camilo tiene 45 años, ha publicado 166 libros y es líder de un movimiento de defensa de los derechos de los padres para ver a sus hijos, a lado de la Fundación Instituto de Apoyo al Hombre (Fundiapho).
