El excombatiente Juan Carlos Corrales teme por su vida, ya que afirma que desde hace más de un mes recibe amenazas.
El musculoso afirma que lo están extorsionando y hasta le han inventado cosas que no son con tal de dañar su imagen.
Corrales agregó que a raíz de todo esto lleva varios días sin dormir bien y que se siente muy intranquilo cuando anda por la calle.
Juan K, como le dicen sus amigos, le dijo a La Teja que quería contar todo lo que le está pasando para ver si así lo dejan de molestar, ya que de lo contrario acudirá a las instancias judiciales.
– ¿Qué es lo que está pasando?
– Es un poco extraño. En estos momentos estoy pasando por una de las mejores etapas de mi vida y a la vez una de las más difíciles. Es la mejor porque hace poco conocí a una persona muy importante, que ha sido un gran apoyo para mí y ha estado ayudándome a salir adelante. De ella prefiero no hablar porque después van a querer joderme por ella también.
También es la más difícil, porque ahorita estoy muy preocupado por mi nombre, ya que sufrido difamaciones y chantajes. Yo subo una foto en mis redes sociales y con perfiles falsos ponen que tienen audios e imágenes inéditas de Juan Carlos. Creo que la gente cree que uno tiene plata porque salió en televisión, ya que el fin de ellos es sacarle plata a uno.
–¿Y en realidad tienen esas imágenes?
Yo sé que el que nada debe nada teme. Por mí pueden decir que tienen fotos mías o lo que sea, porque yo sé que nada que ver.
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– ¿Por qué es dice que lo están extorsionando?
– Algo parecido me había pasado una vez, ya que hace un tiempo alguien me escribió de un WhastApp falso diciéndome que tenía fotos y conversaciones mías muy comprometedoras y que si yo no depositaba cierta cantidad de dinero a una cuenta todo eso se iba a saber.
– ¿Y qué pasó?
– Lo ignoré, porque yo no iba a sacar de mi bolsillo sabiendo que no soy de hacerme videos ni nada de eso. Un día de estos subí una foto y en uno de los comentarios pusieron que buscarían a La Roncha y a La Teja porque tenían que ofrecer unos audios y fotos inéditas mías, poco después empezaron las difamaciones. Yo le he escrito para decirle que qué gana con eso y lo que me contesta es que la noticia vende.
– ¿Qué tipo de difamaciones?
– Usted sabe que mucha gente del medio hace cosas que no tiene que hacer, ya sea para ganar plata o por lo que sea, pero yo no soy así. Yo hablé con mi mamá y mi pareja y les dije que iba a hacer todo esto público porque ya me tienen cansado. Yo sé sus nombres (quiénes son), pero no los puedo mencionar porque no son del medio, aunque estoy pensando muy seriamente en poner una denuncia por difamación.
–¿Qué pasa con la gente que estuvo en Combate que tiene tantos problemas?
Lamentablemente, pagamos justos por pecadores, ya que algunos que han pasado por este programa (Combate) han hecho muchas, como el tema de Kahel (Ramos, acusado de homicidio) o de Jeinol (Salas, acusado de robo), entonces la gente piensa que a todos nos pueden juzgar igual.
– ¿Y de dónde cree usted que han tomado esas supuestas imágenes con la que lo están extorsionando?
– Vieras que yo no soy de hacer desnudos en videos o salir así en fotos, ni audios de ese tipo. Tal vez uno de repente habla muchas tonteras y tengan un audio comprometedor, pero no sé. Fotos chingo no porque yo soy muy cohibido en eso. O tal vez es que tengan fotos en las que estoy tomando, usted sabe cómo es la doble moral aquí que por ser conocido uno no puede hacer ciertas cosas.
– ¿Qué medidas ha tomado?
– He llegado a un punto en el que no he querido publicar nada en Facebook, ni en Instagram ni hacer videos de nada porque yo ya sé que se va a prestar para algo más.
–¿Y cómo lo ha afectado todo esto?
El tema me ha afectado tanto sicológicamente que ya no quiero salir de mi casa, si ando en un mall ando escondido, como con miedo de que se aparezca alguien y me haga algo o me diga cosas que no tiene que decirme. Ahora cuando salgo de mi casa me fijo quién está y quién no, por si me están siguiendo.
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– ¿En qué más se ha visto afectado con todo esto?
– Me ofrecieron un trabajo en Combate Guatemala y por mi hija (de 2 años) no lo voy a agarrar, sé que es una gran oportunidad para mí, pero siento que no es un buen momento. A veces sí pienso dejar todo botado aquí e irme y hacer mi vida allá, pero mi papá me dice que eso no me va a servir de nada y que lo que tengo que hacer es enfrentar las cosas y listo. A parte, que no puedo dejar a mi hija.