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Los magistrados de la Sala Constitucional ya valoraron el habeas corpus interpuesto por el exjugador Alonso Solís, tras su detención del 14 de febrero anterior.
El recurso que presentó el exfutbolista saprissista fue declarado sin lugar por los miembros de la Sala IV pues, según supimos en La Teja, no encontraron ninguna irregularidad en el accionar de las autoridades judiciales.
Según dice la resolución, los magistrados no estimaron que “las autoridades recurridas hubieran actuado arbitrariamente”.
“Según logró constatar el Tribunal Constitucional, el tutelado (Solís) es imputado en un proceso penal, por el delito de ofensas a la dignidad y otros. El 19 de octubre de 2021 la Fiscalía recurrida hizo constar que informó al imputado que debía presentarse el 01-12-2021 para su indagatoria; sin embargo, no compareció a aportar sus datos de identificación, ni tampoco para indicar un medio para recibir notificaciones. Además, el 27 de enero de 2022 la Fiscalía accionada solicitó al Juzgado Penal recurrido decreta rebeldía y orden de captura contra el titulado, lo cual se hizo por resolución las 10:39 horas del 07 de febrero de 2022″.
“Para los jueces constitucionales, la detención de las 09:03 horas del 14 de febrero de 2024 estaba respaldada por una resolución formal, dictada en razón de la desatención del tutelado al proceso”, dice la resolución de la Sala IV.
Dos días después de ser detenido por un supuesto delito de agresión doméstica que interpuso su actual pareja en su contra en el 2019, el cantante decidió acudir a la Sala IV al considerar que hubo un daño tras cortarle su libertad por tantas horas.
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El recurso de habeas corpus es el mecanismo judicial garante de la libertad e integridad de la persona, es además el que protege la libertad de tránsito, libre permanencia y salida e ingreso del territorio nacional.
Solís pretendía con este recurso, además, que se condenara al Estado al pago de daños y perjuicios por el supuesto daño ocasionado por detenerlo más de ocho horas en el Segundo Circuito Judicial de San José y exponerlo a la prensa cuando lo llevaban esposado para la celda judicial.
