Actor pasó de hacer malabares en semáforos a debutar en tele con La Ofi

En la serie La Ofi, de Teletica, Wilbur ha sabido ganarse el corazón de sus compañeros de Paquetex, pero lo que muy pocos saben es que Allan Castro, actor que interpreta el personaje, antes se ganaba el corazón y los aplausos de la gente cantando en los buses y haciendo malabares en los semáforos.

Allan es más conocido en el mundo artístico como Telémaco Camaleón.

Conozca más de este artista, de 30 años, vecino de Calle Fallas, de Desamparados, quien está debutando en la televisión nacional.

Eso sí, Telémaco Camaleí ya tenía experiencia en la tele internacional, pues en el 2019 participó en el programa “México tiene talento”, de TV Azteca, donde logró llegar a la gran final.

-¿Cómo surgió en la actuación?

Primero empecé hace quince años con un grupo de circo y zancos y hacíamos pasacalles y show de circo, pero fue porque mi hermano mayor empezó este grupo “Los zancudos vivarachos” con amigos de él y yo quería seguir sus pasos.

Ese mismo año (2006) empecé clases de guitarra y me terminé dedicando al arte circense, a la actuación y a la música.

He cantado en buses, malabares en los semáforos, shows en la plaza de la Cultura, en festivales de la luz y en fiestas.

- ¿Cómo fue esa etapa de mostrar su arte en las calles?

Eso fue cuando me metí a la universidad a estudiar artes y en ese entonces decidí irme de la casa de mis padres, porque yo quería seguir haciendo lo que me gustaba, pero necesitaba sobrevivir y la verdad fue muy bonito porque siempre lo hice con mucho gusto. Lo de cantar en los buses (de las rutas de San Pedro y de Escazú) también lo disfruté un montón y el estar en los semáforos haciendo malabares, porque yo lo veía como un espacio para ensayar, pero sí tengo que confesar que me llegué a cansar porque es muy desgastante, mucho por el clima o porque eran muchas horas de andar y a veces no eran tan rentable.

- ¿Vivió alguna injusticia o humillación cuando trabajaba en la calle?

A veces yo empezaba a hacer el número y había demasiada tensión en la calle y los dos carros que quedaban frente a uno, de carro a carro, los conductores empezaban a madrearse o gente que quizá no le gustaba lo que hacía.

Había gente que lo vacilaba a uno, ponían un billete y cuando uno iba a la ventana lo quitaban y arrancaban y se iban. O tiraban las monedas al suelo, para que uno las juntara.

- ¿Qué pasó después de esa etapa de su vida?

Junto con dos de mis hermanos y mi mejor amigo del colegio montamos el grupo Circo Lo y empezamos a buscar festivales en otros países donde presentarnos y gracias a la gestión de mi hermano Luis Mauricio y el patrocinio del Instituto Costarricense de Turismo (ICT), logramos ir a México en el 2013 y ahí conocimos a un grupo colombiano y se nos dio la oportunidad de ir en el 2014 a Colombia a otro festival y luego fuimos a otro a El Salvador.

- ¿Cuándo llega la oportunidad de participar en el programa mexicano de talentos?

En el 2018 tomé la decisión de irme a vivir allá como por un año. Yo ni sabía que existía ese programa, mi hermano menor, Brando, se había ganado una audición para irse a estudiar circo a México y yo decidí irme con él porque en este circo daban cursos libres y quería entrenar, como había que sobrevivir tuvimos que volver a recurrir a los espectáculos de calle y ahí conocimos un payaso que me recomendó en el programa.

-¿De qué trataba el espectáculo que presentó?

Ahí eran cuatro rondas y si uno iba pasando, cada vez hay que presentar algo distinto y yo ni sé ni cómo llegué hasta la final (2019) y como yo no sabía nada del programa, creí que era un solo día y ya, y yo me llevé toda la carne al asador de los números que tenía y ya para la tercera y cuarta ronda sí tuve que inventar nuevas rutinas.

Yo tengo un personaje que se llama Bombi-Man con el que hago comedia física desde 2012, que es una combinación de teatro, acrobacias, circo, música, pantomima, danza y tal vez por eso llama un poco la atención. Al final el público decidía al ganador por votos y yo era el único extranjero.

- ¿Y cómo es que termina en La Ofi?

Desde el 2016 trabajo con Mauricio Astorga en su teatro El Triciclo y he estado en varias obras. De hecho, una de las personas que más me apoyó cuando me fui a México fue Mauricio y ahora que regresé me dio la oportunidad de presentarme con Bombi-Man en el teatro, como él entiende mucho mi trabajo físico y Wilbur, el de La Ofi, tiene como sus cosillas, como la voz y el aspecto físico, siento que él vio que yo le calzaba bien y me lo ofreció.

La verdad es que estoy disfrutando mucho la experiencia y me siento muy cómodo con el personaje.