En un momento diplomático importante, la cría de cuatro meses, y recién bautizada, no lo vio así y atacó con un gruñido a su madrina, la primera dama francesa cuando iba a acariciarla.
En un momento diplomático importante, la cría de cuatro meses, y recién bautizada, no lo vio así y atacó con un gruñido a su madrina, la primera dama francesa cuando iba a acariciarla.