Hasta los narradores de ESPN dejaron en evidencia que no haberle puesto nombres a las camisas de los seleccionados se ve mal porque con el nombrecito en la espalda es más fácil que los muchachos se den a conocer.
Hasta los narradores de ESPN dejaron en evidencia que no haberle puesto nombres a las camisas de los seleccionados se ve mal porque con el nombrecito en la espalda es más fácil que los muchachos se den a conocer.