Una botella de leche por semana, plata para reconocer tiempo perdido en las presas, plata si los empleados se casan... Así se desangran, poco a poco, los finanzas del Estado.
Una botella de leche por semana, plata para reconocer tiempo perdido en las presas, plata si los empleados se casan... Así se desangran, poco a poco, los finanzas del Estado.