Una audaz y valiente niña de 10 años metió los dedos en las fosas nasales de un caimán para escapar del reptil de tres metros de largo que la estaba mordiendo en la pierna.
Una audaz y valiente niña de 10 años metió los dedos en las fosas nasales de un caimán para escapar del reptil de tres metros de largo que la estaba mordiendo en la pierna.