Ganarle una final a la Liga con Wálter Centeno como entrenador un lunes 29, número con el que los manudos sufren pesadillas desde hace seis años y medio, es una oportunidad muy grande para que los morados le saquen el jugo.
Ganarle una final a la Liga con Wálter Centeno como entrenador un lunes 29, número con el que los manudos sufren pesadillas desde hace seis años y medio, es una oportunidad muy grande para que los morados le saquen el jugo.