Su esposo se transformaba en una bestia debido al fútbol, el cual utilizaba de pretexto para tirarle la comida en la cara o para gritarle: !Saprissista malparida!
Su esposo se transformaba en una bestia debido al fútbol, el cual utilizaba de pretexto para tirarle la comida en la cara o para gritarle: !Saprissista malparida!