El gerente general de Guanacasteca Yosimar Arias le tiró con todo a la Unafut, por el tema de la disputa de puntos del Santos de Guápiles.
La ADG apeló la indebida alineación del asistente caribeño Sandro Alfaro. La Unafut, presidida por Vicky Ross dio con lugar el reclamo de los chorotegas, pero luego, Santos presentó una solicitud de revocatoria y a media semana, Unafut le devolvió los puntos a los caribeños, hecho que tiene muy molesto al gerente guanacasteco.
“Somos un país que hemos ido a los últimos tres mundiales y no podemos tener un fútbol que lo manejen personas que no saben y que no les interesa. Creo que el puesto les queda muy grande la verdad, o sea no nos pueden dar los tres puntos
“¿Por qué no nos rechazan la solicitud de una vez? A nosotros nos ilusiona y hacemos números, es un desastre no trabajan juntos, cada uno jala para su lado”, comenzó diciendo Arias, en declaraciones a Teletica Radio.
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Luego, el dirigente cuestionó el hecho de que les quitaran los puntos que se la había otorgado.
“El martes nos ratifican los puntos porque le rechazan la apelación al Santos y el miércoles nos quitan los puntos. Yo soy de Nicoya y hay muchos torneos en barrios que eso no pasa, se lo puedo asegurar que hay más organización en los torneos de barrio en Nicoya que ahí adentro, es decepcionante.
“No podemos seguir en esta situación, un fútbol que quiere mejorar, un fútbol nos creemos el mejor de Centroamérica, un fútbol que no podemos clasificar al Mundial de Clubes, un fútbol que no podemos ganarle a los equipos de México y Estados Unidos”, expresó.
En criterio de Yosimar, la responsabilidad de lo que falta en el fútbol local también es culpa de los presidentes de los clubes, quienes ponen en sus puestos a los dirigentes de la Unafut.
“Los presidentes son culpables porque ellos son los mismos que ponen a esas personas y después nos salimos quejando. Yo puedo quejarme porque soy gerente deportivo y no se me toma en cuenta porque no es mi trabajo, pero los presidentes son los que ponen esas personas y luego salen llorando.
“Yo no tengo nada en contra de esta señora Vicky Ross, pero no puede ser tan fan de la Liga, de verdad. Es como que me ponga a mí ahí, saben de mis colores y para donde voy a jalar siempre, pero ojalá todo cambien”, agregó.