Por primera vez en seis años, la costarricense Yokasta Valle probó el sabor de una derrota al caer este viernes ante la méxico-estadounidense Seniesa Estrada en un reñido combate en el que estaban en juego los títulos de las 105 libras de todas las organizaciones de boxeo.
Desde el 2018 la tica no perdía un combate, cuando cayó ante la alemana Tina Rupprecht, desde entonces con muchísimo mérito y valentía, sumó un invicto de 17 combates lo que le valió llegar a esta pelea como la campeona del mundo en la Organización Mundial de Boxeo (OMB) y la Federación Internacional de Boxeo (FIB).
Tras la derrota en el Desert Diamond Arena en Glendale, Arizona, la tica cedió sus títulos a Estrada quien ahora unificó todos los campeonatos en la división, dado que ya era monarca de Asociación Internacional de Boxeo y el Consejo Internacional de Boxeo.
Además Seniesa mantiene el título de la revista The Ring, una distinción sumamente prestiogiosa que tenía Estrada y que la distingue como la mejor del mundo en su categoría.
La local era la favorita tanto de las apuestas, como de los expertos, al pelear en su país y cobijada por la empresa Top Rank, quien produjo la velada, aunque eso no hizo que Yoka se hiciera por menos y no estuviera a la altura de las circunstancias.
Yoka no era ninguna de las rivales que le llevaron a Estados Unidos en el pasado, con poca experiencia en algunos casos, sin haber peleado jamás en un ring gringo, a quienes se las llevó facilitas.
Con la Campeona del Pueblo obvio que eran otros cien pesos, fue un combate en el que demostró toda su confianza, experiencia y preparación de una guerrera que hace tiempo sabe lo que es pelear en tierra gringa y que vendió muy cara su derrota y posiblemente de ser en otro lugar la pelea el resultado hubiera sido otro.
Desde que subió al ring , la tica demostró que en determinación, garra y corazón, estaba totalmente enfocada en su objetivo y que es toda una campeona más allá de tener cinturones que lo digan.
Una derrota no quitará a Yoka la leyenda que es para el deporte costarricense, que está en el olimpo junto a figuras como Clauida Poll y Keylor Navas y que más temprano que tarde, volverá a los sitios que está acostumbrada.