Yeltsin Tejeda llegó este año al Herediano como un fichaje bomba, se trataba de un dos veces mundialista que le robaron de las manos a Saprissa.

Por eso no es de extrañarse que la primera parte del campeonato estuvo cargada de protagonismo para el oriundo de Limón, con muchos minutos y hasta con la camiseta número 10 en sus espaldas, algo que más de uno cuestionó dada su posición y oficio de marcador.

Pero una lesión en la fecha 15 ante Jicaral sacó a Tejeda de las canchas justo el día en el que José Giacone debutó en el banquillo florense, lo que le mató el ritmo al volante y le impidió que su nuevo técnico lo viera en acción.

Cuando Yeltsin estaba listo para volver, al final de la segunda vuelta de la fase regular, el argentino ya había acomodado un once, por lo que al contención le ha costado sumar minutos en el tramo más importante del campeonato.

Entre las jornadas tres y 15, el volante jugó 787 minutos de los 807 que suma en total en el torneo, lo que muestra que lleva rato sin ser protagonista.

“Me perdí casi toda la segunda ronda y eso me costó, tuve una lesión de dos meses, una fisura en el pie y, bueno, ahora tomo otro rol, me toca estar en banca, apoyar, entrar de cambio si lo necesitan”, explicó Tejeda.

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Y es que en los días en los que que Yeltsin estuvo ausente, el Team agarró su mejor forma, tuvo una seguidilla de triunfos, se metió a la segunda roda y a las finales del campeonato, situación que el jugador entiende

“Soy un jugador que me tomo estas cosas con mucha tranquilidad porque en esos dos meses el equipo jugó, ganó, clasificó, lo hizo muy bien, por lo que uno puede llegar pidiendo o exigiendo nada en este momento”, mencionó.

Esfuerzo

Tejeda se puso como meta estar disponible para la segunda fase, pero en las semifinales contra Saprissa solo jugó ocho minutos y en la final de la segunda fase apenas sumó doce minuticos entre los dos partidos.

El domingo, en el primer partido de la gran final, no salió del banco y luce difícil que el próximo sábado se meta entre la pareja de Rándall Azofeifa y Óscar Esteban Granados, salvo alguna sorpresa de Giacone.

De esta manera uno de los fichajes bomba del club se está tirando los toros desde la barrera en el momento clave.

“Todo lo que pude jugué, pero cuando uno es futbolista y se da el tema de las lesiones es difícil. Uno siente que podría estar adentro, pero toca esperar. Cuando estoy lo doy todo, por eso no me voy a desesperar”, explicó.

Algo que a Yeltsin nadie se lo quita es que está a 90 minutos de levantar su segunda copa de campeón en Tiquicia, algo que no sería posible si hubiera regresado a Tibás.

“Eso ya quedó atrás, con la decisión que tomé estoy tranquilo, ahora estoy en Heredia y daré todo por ellos, tanto si juego como si estoy en la banca, ya (lo de Saprissa) es algo que ni lo pienso”, finalizó.