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Ni con selecciones viejas, ni con selecciones nuevas, ni con Saprissa, la Liga o Heredia de base, ni con muchachos que nunca habían estado con Luis Fernando Suárez, el equipo del colombiano no parece tener remedio, es la misma tristeza de siempre. Ahora el colerón fue con Guatemala, al caer 1-0 anoche en un triste amistoso en Carson, California.
Cómo le cuesta a la Tricolor mantener un estilo, un ritmo, una idea; a muchos les sorprendería escuchar que el cafetero tiene dos años en su puesto. Pareciera que llegó ayer y apenas está tanteando con qué cuenta y cómo puede armar equipo.
Suárez sigue cambiando muchas caras entre juego y juego y hasta inventando planteamientos. Esta vez salió con tres 10: Aarón Suárez, Cristhoper Núñez y Wílmer Azofeifa, pero sin contención. Los metió hasta que íbamos perdiendo.
¿A qué juega la Sele? Es la pregunta que muchos se hacen, porque ante rivales de jerarquía nos cuesta un mundo, pero ante otros que se supone estamos igualados y contra los que se supone son inferiores, como Guatemala, tampoco se ve.
Hay que ser muy sinceros, sin menospreciar a los chapines que vienen armando un nuevo proceso, con un entrenador muy conocido en el área, como lo es el mexicano Luis Fernando Tena, no debería darle estos problemas a Costa Rica ni en un amistoso.
Si somos buenos para rajar que tenemos seis mundiales, que nos invitan a la Copa América o que alguien de vez en cuando nos menciona en el mundo del fútbol, debemos serlo para ganarle a este tipo de rivales.
Hace 20 o 30 años la excusa de que Guate era un rival tradicional servía, hoy ya no, ha pasado mucho en este tiempo para sentirnos cómodos con hacer este tipo de partidos a rivales que hace rato, en teoría, los habíamos dejado muy rezagados.
Basta también con caras que ya no dan; ¿cuántos errores más tiene que cometer Keysher Fuller para dejar de ser una opción para la Sele? Ya ni si siquiera en Herediano parece tener un campo seguro, solo para Suárez sigue siendo intocable.
Y no es solo el gol de este jueves, ya que el tanto con el que la bicolor abrió el marcador nace por un regalo en salida del lateral, sino por su nivel en general.
Fuller quizo salir jugando, el chapín Alejandro Galindo se la robó, se fue junto a un compañero y cuando iba entrando al área se la puso a Carlos Mejía, que definió con un remate a la derecha de Kevin Chamorro, apenas en seis minutos.
De la Sele poco hubo en el primer tiempo, un tiro afuera del área de Diego Campos, quien jugó solo un tiempo sin poder mostrarse mucho. Teníamos la bola en media cancha, pero al marco del buen arquero Nicolás Hagen, no llegábamos casi nunca.
Un cabezazo al palo de Kendall Waston y un tiro libre de Aarón Suárez fueron la del segundo tiempo, pero los problemas de creación y falta de ideas siguieron.
El martes contra Ecuador, en otro amistoso, veremos con qué nos sorprenden o, más bien, con que nos espantan ahora
