William Quirós, defensor del Club Sport Cartaginés vive un año de ensueño, superando retos a nivel personal y profesional.
El jugador de 30 años se graduó a finales de octubre como administrador de empresas, gracias a un convenio entre Cartago y la universidad Fidélitas y junto a su hermano José, quien también es su compañero en el club brumoso está por finalizar un proyecto habitacional en Guanacaste.
Pero eso no es todo, hace cuatro meses, Quirós comenzó una nueva vida, en la Vieja Metrópoli y ahora vive solito, al lado de sus perros, Macarena y Lucas y contó que todo ha sido fruto del esfuerzo de sus padres y de su empeño fuera de la cancha, por buscar un camino paralelo al fútbol.
“Comencé a estudiar Ingeniería Industrial, seis meses después de salir del colegio y desde llegué a Herediano pedí en los contratos que me incluyeran una beca, para aprovechar los convenios que tienen las universidades con los clubes.
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“Al año me di cuenta de que la ingeniería no era lo mío y me incliné por la administración, porque me gustan los números y la verdad llevé la carrera muy despacio. Matriculaba dos materias por cuatrimestre y en los últimos años aproveché la virtualidad, eso me ayudó aún más”, relató.
Willian contó que cuando estaba en selecciones menores viajaba mucho, sobre todo cuando disputó un premundial y perdió algunos cursos, a causa de los horarios, porque en ese momento todos las clases eran presenciales, pero poco a poco se fue organizando y lograba avanzar con su carrera.
“Siempre en la universidad hay que hacer trabajos grupales o exposiciones y me chocaban con algún viaje o partido. Siempre conversaba con los profesores y me permitían hacer trabajos solo y le ponía bastante, pese a las dificultades”; dijo.
“Me llama la atención ver que en los clubes hay becas y los jugadores no las aprovechan. Siempre pedí en los contratos recibir una beca, porque es un beneficio para toda la vida”.
— William Quirós, jugador Cartaginés.
Oportunidad de oro
El defensor está feliz de la vida, porque desde los 18 años comenzó a estudiar en la universidad y después de tanto tiempo ya logró graduarse.
“Mis mejores amigos no son futbolistas y siempre los he admirado mucho; uno es farmacéutico, otro estudió Derecho y a todos les va bien, salieron a tiempo de la universidad. Este título, fuera del ámbito deportivo me da tranquilidad y ahorita me siento más libre, quiero vivir el fútbol mucho más de lo que los disfruto el día de hoy.
“En este momento ya trabajo en dos opciones para cuando deje el fútbol, porque sé que esto es pasajero. Recuerdo que cuando estaba en Heredia había 10 becas disponible y sólo yo las aprovechaba y ahora que me gradué vi que los jóvenes del alto rendimiento me preguntaban cosas, y los motivé porque algunos no habían terminado el colegio”, contó.
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Planes
A nivel profesional, William está trabajando con su hermano José Luis en un proyecto habitacional en Guanacaste. Esperan en diciembre comenzar a alquilar esta propiedad.
“Estamos construyendo un airbnb (espacios para alquilar), que consta de una casa y dos apartamentos. Ha sido muchos sacrificios, invertimos nuestro ahorros y admiro a mi hermano porque se animó conmigo a participar en este proyecto, hemos sido muy responsables y sé que en un tiempo podremos recuperar el dinero que hemos utilizado para lograrlo.
“Lo que me gusta de la administración es que es una carrera muy versátil, te ayuda en cualquier proyecto de la vida y más allá de trabajar en una empresa, uno puede desarrollar proyectos propios y eso me ilusiona, por eso me gusta la carrera que escogí”, afirmó.
William quiere trabajar con su papá en una empresa de publicidad que tiene la familia. Juntos han hablado de modernizar la empresa, darle un refrescamiento, que lo considera necesario para que el negocio siga a flote.
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Por otro lado, aún no se ve colgando los tacos, quiere seguir jugando al fútbol y ahora disfruta su vida en solitario.
“Me vine a vivir cerca del estadio de Cartago y con eso compenso lo que invertía en gasolina para asumir otros gastos. Antes, por mes gastaba más de 100 mil en combustible y ahora ese dinero lo uso para otros gastos.
“He planificado muy bien las cosas y eso me ha ayudado con esta experiencia. Soy muy casero, pero también me encanta la montaña, entonces cuando tengo chance me voy a pasear. Prefiero eso que estar jugando videojuegos, hace poco me compré un PlayStation, pero casi no lo uso”, dijo entre risas.