Ángel María Villar, presidente de la Federación Española de Fútbol durante los últimos 29 años y detenido este martes por supuesto mal manejo de fondos, tenía una relación cercana con Eduardo Li, expresidente de la Fedefútbol, quien está libre bajo fianza en Estados Unidos y a la espera de una sentencia por el escándalo de "FIFAGate", destapado desde el 2015.
LEA MÁS: Sorteo de la Liga Española está en suspenso
La justicia española cree que Villar promovió partidos entre la selección española y otros combinados patrios, con el fin de obtener plata "para la contratación de servicios y otras relaciones comerciales en beneficio de su hijo, abogado especialista en derecho deportivo”.
No está claro si entre esas mejengas estaría el amistoso jugado por los ibéricos ante Costa Rica, en el 2011 en el Estadio Nacional,
Recordemos que la cercanía entre Li y Villar hizo posible que España, coronada campeona del mundo en Sudáfrica 2010, visitara nuestro país el 15 de noviembre del 2011, en un juego que quedó empatado a dos, en el estadio Nacional, cuando era casi imposible que los ibéricos jugaran un amistoso ante un equipo como el tico.
Incluso, una de las razones para la detención de Li en el caso de la FIFA fue haber recibido recibido ¢374 millones, de ese monto hubo casi ¢180 millones que aceptó para que la Sele jugara amistosos, sin embargo, no se ha hecho público cuáles partidos fueron y si el choque ante España está en esa lista.
La última vez que Li fue visto en público en funciones de presidente de la Fedefútbol fue junto a Villar, el 21 de mayo del 2015, cuando firmaron el acuerdo para otro amistoso entre ticos y españoles, jugado esta vez en León, España, el 11 de junio del mismo año, cuando la Nacional cayó 2-1.
Li lo invitó a la inauguración del Nacional
Cuando se dio el fogueo del 2011 en suelo costarricense, Li y Villar dejaron en claro que el juego se daba por la excelente relación entre ellos.
"Estamos de maravilla. El presidente de la Federación de Costa Rica (Eduardo Li) nos ha tratado de maravilla", dijo Villar luego del entrenamiento de la Furia, en noviembre del 2011.
También aclaró que la visita del conjunto español a nuestro país era posible gracias a "la extraordinaria relación" que tenía con Li, quien lo había invitado, además, a la inauguración del nuevo Estadio Nacional, en marzo del mismo año. Sin embargo, otros compromisos impidieron su visita.
"Tengo que decir que si yo no hubiera tenido una estrecha relación con el presidente de la Federación de Futbol de Costa Rica, hubiese sido más difícil la posibilidad de jugar aquí”, agregó en esa oportunidad Villar.
Li tampoco se quedó atrás y mantuvo el mismo discurso del ahora dirigente investigado.
Aparece Costa Rica
Aunque Villar fue de los poquitos altos dirigentes que se salvó hasta la fecha del escándalo de la FIFA, el 29 de diciembre del 2016, el prestigioso diario El País de España, informó sobre unas facturas sospechosas presentadas por el español y donde aparecía el nombre de Costa Rica.
"La deficiente justificación que la Federación Española de Fútbol (FEF), presidida por Ángel María Villar ,hizo de los 1,2 millones de euros (más de ¢806 millones) de dinero público recibidos a través del Consejo Superior de Deportes (CSD) en 2011 está plagada de facturas sospechosas", escribió El País a finales del año pasado.
Ese monto, Villar debía destinarlo a cuatro proyectos y debían estar listos para el 31 de agosto del 2011, sin embargo, nunca se dieron y presentó facturas sin ninguna relación con lo que había prometido.
Toda la vida |
---|
29 años lleva Ángel María Villar como presidente de la Federación Española de Fútbol. |
"Aparecen unas escuelas en Costa Rica, cuya Federación publica en su web, en setiembre de 2011, que se ha firmado un acuerdo con la FEF (Federación Española de Fútbol) para desarrollarlas en el futuro, es decir, fuera de los plazos. A costa de este proyecto se facturan con dinero público cuatro tiquetes de avión para cuatro empleados federativos, por valor cercano a 10 mil euros cada uno, (¢6.7 millones), en el mismo vuelo en el que se desplazó la selección (española) al país centroamericano (Costa Rica) para disputar un amistoso en noviembre de 2011", indicó El País.
El diario español agregó que entre las facturas, añadieron otras "por la compra de mobiliario por parte de la Fundación para un seminario impartido en Las Rozas (ciudad deportiva de la selección española) a cinco personas de nacionalidad costarricense".
La necesidad de justificar los gastos era porque si no lo hacían, Villar y la Federación Española debían devolver ese 1,2 millones de euros.