Videos: Anthony Hernández y Kendall Waston salvaron un amistoso que pintaba para el olvido

En una mejenga que pintaba para el olvido y que hacía que más de uno se lamentara por desvelarse, dos goles en el tiempo de reposición le dieron a Costa Rica el triunfo 2-1 ante Uzbekistán.

El porteño Anthony Hernández al 92′ y Kendall Waston al 93′ le dieron la vuelta a un partido en el que no nos vimos nada bien.

La Torre fue quien salvó los muebles, porque en el primer pepino la ganó arriba para que le quedara a Anthony Contreras, quien remató y el chuchequero anotó en el rechazo del arquero rival, y porque en el segundo marcó con la especialidad de la casa, de cabeza, luego de un gran tiro libre de Álvaro Zamora, sin duda el chamaco sabía dónde se la debía poner a su compañero de club.

Este tipo de partidos deben ser muy ricos para el técnico Luis Fernando Suárez, ver quién la pegó y quién no, medir un estilo de juego diferente al que nos tiene acostumbrados su equipo. Tratando de proponer, armar y generar juego, el equipo se vio muy flojito.

Suárez tiró una alineación llena de variantes, diez cambios respecto al amistoso ante Corea del Sur, pero los once elegidos en esta ocasión no pudieron mostrarse tanto. En el primer tiempo hicimos un solo tiro a marco, uno de Brandon Aguilera y ya. El rival tuvo mejores opciones.

Al 25′, Eldor Shomurodov, el atacante uzbeko de la Roma de Italia y principal amenaza en ofensiva del cuadro asiático, nos vacunó luego de una mala salida de la Sele, en la que Orlando Galo perdió la pecosa en la media, reclamando una falta que no se pitó. Puro fútbol nacional.

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Los asiáticos pusieron el balón al área rápido y Eldor definió sin problema ante la salida de Aarón Cruz.

Cabe decir que el único que aprovechó su chance en la inicial fue el portero, quien incluso salvó un par de tortas de Kendall Watson y Juan Pablo Vargas, quienes regalaron la pecosa en salida. Algo que ante equipos de verdadero oficio es un pecado mortal.

Para la segunda parte, Cruz le dio su lugar a Patrick Sequeira y además entraron Bryan Ruiz, Carlos Martínez, Anthony Contreras y Álvaro Zamora, este último se salvó que no lo echaran por un hachazo feo que le pegó a un uzbeko.

A la mitad del segundo tiempo entró el porteño Anthony Hernández, quien lució como la variante más desequilibrante y hasta se fue con gol.

Salieron Brandon, Carlos Mora, Johan Venegas y Bryan Oviedo, de quienes se puede decir muy poco de su participación, flojitos igual que la mayoría de la Sele.

Más allá de los goles conseguidos al cierre, hay que reconocer que no tuvimos profundidad, vértigo ni la chispa mostrada el viernes con otra gente. No hay que taparlo todo con el resultado, pero ganar siempre es importante. Empatamos y ganamos uno, es un buen balance.

Que el ensayo sirva para dos cosas, queda claro que en Catar vamos a ser el rival que espera, aguanta y no el que propone el juego y la otra, es clarísimo que tenemos un equipo titular que no es este, son de niveles muy diferentes y a algunos ni les alcanzará para meterse al menos en banca.