Óscar "el Machillo" Ramírez y sus pupilos buscarán este martes en el estadio Rommel Fernández de Panamá hacer que el camino hacia el Mundial de Rusia 2018 se convierta en el mejor de todos en cuanto a porcentajes se refiere.
Lo curioso es que muchos fiebres le han tirado duro al proceso de Ramírez, sin valorar que este grupo podría convertirse en el mejor a la hora de clasificar a un Mundial.
Aunque los anteriores apuntes se realizaron con dichos procesos ya finalizados, en el caso de la clasificación a Rusia, hay que hacer la salvedad de que falta la mejenga contra Panamá.
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Eso sí, en los 15 partidos ya jugados, todos dirigidos por el Machillo, segundo técnico que arranca y termina una eliminatoria, ya se tiene un 71,1 %, el mejor de todos los tiempos por el momento.
Ahora la Sele tiene 90 minutos para convertirse en la mejor representación en lograr una clasificación a una Copa del Mundo, pero para lograrlo deberá triunfar este martes ante los canaleros para cerrar con un rendimiento del 73 %.
Si el equipo de Ramírez, empata quedaría con 69 % y si cae contra los panas, su rendimiento será de un 67 %. En ambos casos el escuadrón tico tendría el segundo puesto.
"Óscar es un gran estratega y sabe analizar muy bien a cada rival, siempre buscó el boleto y él no iba arriesgar, gracias a eso ya clasificó a Costa Rica", comentó Hermidio Barrantes, quien jugó en el Mundial de Italia 90.
El exportero señaló que la unión que muestra la Sele es clave para lograr esta clasificación.
"No creo que eso se dé (callar bocas), porque en nuestro medio, cuando no tenemos la razón siempre vamos a buscar el pelo en la sopa para bajarle el piso al que lo está haciendo bien", lamentó Barrantes.
Otro mundialista de Italia 90, Juan Cayasso y quien entró a la historia al convertirse en el primer costarricense en clavar un pepino en un Mundial mayor, también opinó sobre la clasificación del Machillo.
“Para mí, Óscar y la selección hicieron lo correcto, porque desde el principio siempre se tuvo claro el norte”, apuntó Cayasso.
“Siempre se jugó calculado, esperando ver qué presentaba el rival y a partir de ahí se dieron resultados muy importantes. En este tipo de hexagonales, no se debe arriesgar más de lo normal”, explicó Cayasso
El verano italiano abrió el camino
La historia de las clasificaciones mundialistas comenzó con Italia 1990, una eliminatoria muy diferente a las otras cuatro que le siguieron.
En aquella oportunidad Costa Rica jugó dos rondas, en la primera se enfrentó a una serie de ida y vuelta contra Panamá, empatando el primer juego 1-1 en suelo tico y ganando 2-0 en el viejo Rommel Fernández.
Luego se participó en una pentagonal, la cual ganó la Tricolor y selló su primer clasificación.
Esa selección disputó 10 juegos para un 66 % de rendimiento, siendo de momento el tercer puesto a nivel porcentual. Esa eliminatoria la arrancó el técnico Gustavo De Simone, quien fue sustitiodo por la dupla Antonio Moyano-Marvin Rodríguez. Rodríguez dirigió solo las últimas tres mejengas y antes del Mundial le cortaron la jupa para poner en su lugar al entrenador Velibor "Bora" Milutinovic, quien llevó a la Sele a octavos de final.
Camino a Asia estuvo bueno
La ruta hacia Corea-Japón 2002, de momento ocupa la segunda posición, ya que al finalizar los 14 partidos, la Tricolor alcanzó un 70,5 % de rendimiento, luego del brete realizado por Gilson Siqueira Nunes y luego por Alexandre Guimaraes.
Esa selección logró la mayor cantidad de puntos en una hexagonal de Concacaf con 23 puntos, hasta el momento la mejor para una selección del área. No obstante, en el Corea-Japón la Sele se ubicó en el puesto 19 entre 32 países participantes.
Con nota baja a suelo alemán
En las siguientes dos clasificaciones mundialistas, se alcanzaron los boletos para Alemania 2006 y Brasil 2014, ambas con un 58 % de rendimiento. Para Alemania el equipo estuvo a cargo de Steve Sampson, Jorge Luis Pinto y Guima y para Brasil Pinto nos dio el boleto.
En Alemania nos fue fatal, ya que terminamos en el puesto 31 entre las 32 selecciones.
En Brasil sorprendimos a todo el planeta, ya que el país se ubicó en el octavo puesto.
Además aquí se rompió el molde, porque por primera vez un solo técnico se mandó todo el proceso de principio a fin.
Cabe recordar que Costa Rica cerrará este martes su eliminatoria número 16, desde que participó por primera vez en el trayecto hacia Suecia 1958.