Lio Messi consiguió este sábado su primer doblete de la temporada y demostró que puede echarse al hombro al Barcelona, a pesar de las ausencias de Neymar, ahora en el PSG y de Luis Suárez, quien está lesionado.
Los dos pepinos que marcó la Pulga fueronb suficientes para que los culés vencieran al Deportivo Alavés 2-0 en condición de visitante.
Este juego abrió la segunda jornada del fútbol español y dejó a los catalanes como líderes provisionales junto a la Real Sociedad.
Lio, que falló un penal al minuto 39, logró adueñarse de un partido que pintaba mal para el Barça. Tras una primera parte agüevada y sin ideas por parte de los culés, al argentino se le encendió la pólvora y firmó dos pepinos, al los minutos 55 y 66 que sirvieron a los suyos para amarrar los tres puntos.
El primero lo hizo tras una corrida de Jordi Alba que supo leer bien las intenciones de Andrés Iniesta. El ‘mago de Fuentealbilla’ metió un balón en profundidad que el lateral puso al centro del área, donde Messi, tras controlar y acomodarse mandó al fondo de la portería local.
El segundo lo anotó tras aprovechar un pase de cabeza de Paco Alcácer -que había entrado a la cancha poco antes del 57'. El exjugador del Valencia cortó con la jupa un despeje de la zaga rival y el balón le quedó muerto al argentino, quien no perdonó.
Con la ventaja de dos tantos, el Barcelona supo controlar la contienda y pudo incluso ampliar la diferencia con un disparo de Messi, referente en el ataque blaugrana toda la mejenga, y que pasó cerca del horizontal al 75'.
“Jugar aquí siempre es complicado, sobre todo a estas alturas de la temporada. Pero hemos sabido ir creciendo minuto a minuto”, resumió el croata del Barcelona Ivan Rakitic.
El duelo había comenzado mal para los hombres de Ernesto Valverde ante un Alavés empunchado y valiente que no les dejó desarrollar su juego a placer.
El técnico culé, ante las bajas en su ataque, dispuso de un 4-3-3 en el que Aleix Vidal y Gerard Deulofeu se ubicaron por los extremos y el argentino de centro delantero.
La fórmula, al menos durante la primera parte, no dio resultado y se vio a un Barça lento y sin picante. Solo Gerard Piqué, que provocó un penal logró agitar a los suyos.
El tiro desde los 11 metros corrió a cargo de Leo, que falló. El arquero Fernando Pacheco le adivinó las intenciones al ’10′ y con una gran estirada y atajó el disparo.
“Ha sido un encuentro en el que hemos tenido que mostrar mucha paciencia. Su defensa estaba muy cerrada, sellaban muy bien los espacios y nosotros estuvimos al principio un poco bloqueados”, explicó Valverde ante la prensa.
Además, la Pulga sumó esta tarde sus goles 350 y 351 en la Liga, en un partido que marcó el debut del brasileño Paulinho, que entró a la cancha en sustitución de Iniesta (88´).