El cuerpo del exjugador y leyenda del fútbol limonense Julio Fuller es velado en el estadio Juan Gobán, en su querida tierra natal.
Entre música, aplausos, camisetas con el apellido Fuller y hasta gritos de “viva el fútbol”, así se desarrolló el último adiós del exdefensor.
Don Julio falleció el pasado jueves por un cáncer de garganta. Tenía 62 años y era vecino de la ciudadela Siglo XXI, en el centro de Limón. Deja cuatro hijos y era viudo.
“Es lo mínimo que podíamos hacer por un personaje tan querido de nuestra provincia, él se entregó por la niñez y juventud de Limón, siempre venía a ver al equipo de sus amores y por eso quisimos despedirlo acá, el fútbol nacional le debe mucho”, comentó Reynaldo Parks sobre este adiós.
La vela inició poco después del juego en el que los caribeños derrotaron 2-1 al Deportivo Saprissa, sin duda el mejor homenaje para Fuller.
El funeral del exdefensor será este domingo a las 10 a.m. saliendo de la funeraria del Magisterio Nacional en Limón.
Fuller destacó en el cuadro caribeño por dos décadas, entre 1974 y 1995, salvó por tres años que estuvo en el Cartaginés, entre 1979 y 1982. Es el segundo jugador con más partidos en la historia del fútbol nacional con 684, solo por detrás de Marvin Obando padre con 685.
Además tuvo a su cargo escuelas de fútbol de donde salieron figuras como Yeltsin Tejeda, los hermanos Kevin y Kenny Cunningham, Jaylon Hadden, el fallecido Dennis Marshall hijo y el lateral del Herediano Keisher Fuller