El nuevo seleccionador de Costa Rica, el uruguayo Gustavo Matosas, conoció esta mañana a los jugadores de la Sele previo al amistoso de esta noche ante México, quienes le dieron una fría bienvenida.

La Federación de Fútbol compartió un video en sus redes sociales con el momento en que los jugadores conocían a su nuevo patrón, el cual dejó mucho que desear por la actitud de los seleccionados

Solo Kendall Waston se puso de pie para saludarlo, los demás ni se movieron de la silla y le dieron la mano con cara de pocos amigos, y eso que Matosas se comportó de manera cordial y amable.

En contraste, los miembros del cuerpo técnico interino que dirige la Tricolor sí fueron un poco más efusivos y recibieron desde la puerta al uruguayo con saludos más amenos.

Para expertos en el área del protocolo la manera en cómo reaccionaron los jugadores ante su nuevo jefe dejó mucho que desear.

“El protocolo para las presentaciones establece que la persona de menor jerarquía se pone de pie al saludar a una persona de mayor jerarquía. El video contrasta la actitud del cuerpo técnico que se pone de pie para saludar al entrenador mientras que los jugadores permanecen sentados”, indicó el experto Juan Carlos Bonilla.

Don Juan Carlos tiene amplia experiencia en el comportamiento de grupos deportivos, dado que es el jefe del departamento de prensa y relaciones públicas del Icoder y asesor en protocolo.

“La otra falla es que al saludarlo, lo correcto es estrechar la mano y mirar a la persona que estamos saludando, lo cual no sucede pues los jugadores miran hacia cualquier parte menos al entrenador”, destacó Bonilla.

Por su parte, Cristy Marín, experta en etiqueta y protocolo señala qie el error se da desde la elección del lugar donde pusieron al entrenador a conocer a los jugadores porque para este tipo de presentaciones no daba la impresión de ser un lugar muy cómodo.

“Sin duda tiene que ponerse de pie porque si bien es cierto él es que está llegando, es su nuevo jefe y entrenador, un superior a ellos, es un error que más bien sea él el que tiene que pasar por cada una de las sillas y meterse entre las filas, dado que el salón no ayudaba mucho lo mínimo que podían hacer era ponerse de pie”, dijo Marín.

Otro detalle que llamó la atención Cristy es que la mayoría de saludos fueron apenas por encimita, casi como si estuvieran poniendo la mano por compromiso.

“El apretón de manos es la primera señal que usted puede tener de una persona al saludarla y en cuanto a muchas cosas: su educación, su cordialidad, su respeto, creo que muchos quedaron debiendo de cómo se comportan en una situación así”, agregó la experta en protocolo.

Diferencias

Para ver un ejemplo de cómo se manejan estas situaciones, está el del 5 de enero del 2016 cuando Zinedine Zidane se presentó a la plantilla del Real Madrid como su nuevo entrenador con Keylor Navas incluido.

Los jugadores merengues, la mayoría superestrellas del fútbol que ganan millones de dólares al año recibieron de pie a su entrenador que los saludó uno por uno adentro del camerino del club.

Los que estaban sentados se levantaron, dieron un apretón de manos fuerte y saludaron de manera verbal a Zizu, sin distingo.

Al turno de Keylor, el tico lo esperaba de pie y con un apretón y hasta hizo una pequeña reverencia hacia su nuevo jefe como se puede ver en el video del momento.

La manera como saludan los merengues en el camerino calza con la descripción dada por los expertos en esta nota, motivo por el que se alude.

Buenos deseos

Acompañado del presidente de la Fedefútbol, Rodolfo Villalobos, las primeras palabras del charrúa hacia los jugadores fueron sobre el orgullo que siente al dirigir la Sele y el compromiso que significa este reto.

“Les dije a los muchachos que venía a ayudarlos y los invité a que trabajemos juntos por esta camiseta, por el país. Ah bueno y les dije que teníamos que ganar hoy”, indicó Matosas

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El nuevo técnico de los ticos fue solamente de visita, porque no está concentrado con el grupo que enfrentará a los aztecas, pero si estará este jueves en el estadio el Volcán, en Monterrey para la mejenga. Como aún no asume, Matosas quiere darle su espacio a los muchachos.

"Soy de los que cree que el día del partido el jugador está como en un trance, esperando la hora del juego, así que hable muy cortito, les manifesté el orgullo de poder trabajar con ellos”, dijo el charrúa.

Ojalá que sea por ese trance que los jugadores no fueron amables con el nuevo mandamás de la Tricolor.

Con quien si estuvo mucho más rato fue con el entrenador interino Rónald González, quien dirigirá los amistosos que le restan a la Sele durante el 2018.

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"Estaré cerca del equipo, estuve dos horas charlando con Rónald (González) y el presidente y seguiré en eso, porque todo esto me servirá para preparar el camino para empezar a trabajar”, aseguró Matosas.