Mientras los aficionados morados piden a gritos refuerzos de peso, a lo interno del club consideran que con los futbolistas que tienen alcanza para pelear por el campeonato de Clausura 2019.

Este martes, en conferencia de prensa, el asistente técnico del Monstruo, Víctor Cordero, explicó que aunque esperan contar con un delantero más para cerrar la planilla, tampoco están desesperados por contratarlo porque para eso tienen a Jairo Arrieta, Randy Chirino y a Johan Venegas.

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“Hay que tener paciencia y seguir trabajando con el grupo que tenemos, que a mí me encanta. Ahorita mismo no nos sentimos en desventaja con nadie”, dijo Cordero.

“Hay que aclarar que Saprissa está muy contento con lo que tiene, con estos muchachos hemos llegado a una segunda en un año, estamos complacidos. Ahora, sí sentimos que se puede mejorar la competitividad dentro del grupo y el apoyo hacia el cuerpo técnico, para mostrar cosas que seguramente se requieren en alguno momentos. El tipo de delantero (que buscan) es que mantenga las características de los muchachos, veloz, ágil, inteligente, que tome decisiones y que tenga buen juego aéreo, porque tenemos buen juego por las bandas y creamos muchas oportunidades, necesitamos un jugador que se sume y de buen rédito en cuanto anotaciones”, agregó.

Para Víctor, esa necesidad de más jugadores es pura percepción de la afición. Dice que él que ve a todos en los entrenamientos poniéndole ganas y por eso cree que tienen suficiente cuadro.

El saprissista aseguró que está deseando que el marco se le abra a Arrieta, quien anda divorciado con el gol y falla oportunidades muy claras, lo que hace que la gente en las gradas se arranque el pelo del colerón, pero el asistente insistió en varias oportunidades que los seguidores del Sapri deben tener un “poquitín” de paciencia.

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No supera la final.

Haber perdido la final ante Herediano el pasado 23 de diciembre tuvo y tiene malo a Cordero, quien reconoció que todavía no supera ese golpe que recibieron en la propia Cueva, donde la visita celebró.

Además, dice que no ve nada extraño que se sigan lamentando.

“Yo antes he dicho, ser saprissista es un sentimiento diferente. Le repito, lo acepto, yo en lo personal, hablando como saprissista, lo de perder el torneo no lo supero, soy un pésimo perdedor, no me gusta. Partido a partido espero ir superando eso, porque no soy de dejar las cosas de lado, constantemente estoy recordando porque perder siendo parte de esta institución es inadmisible uno nunca tiene eso en la cabeza, no es de extrañar que no lo superemos, créame que añoraba la treinta y cinco con muchas ganas y mucha fuerza”, explicó el asistente de Vla.

Incluso, esa derrota lo hizo pasar una pésima Navidad.

“Me cuesta superarlo, pasé dos días en casa, a mi mamá la llamé el veinticuatro y le dije que no estaba de ánimo para ir a la casa y ella me entiende porque convivió conmigo. Esta profesión es pasional, eso no significa que todos los días esté llorando y sufriendo, es tiempo de mirar al frente, mirar al cielo, llenarme de fuerzas y confiar de lo que estamos haciendo hoy”, dijo.