EscucharTeresita Arguedas encontró en su sobrina Valeria Jiménez, no solo una compañera de carreras, sino también el mejor impulso para intentar cruzar la meta siempre entre los primeros lugares.
Tal y como sucedió este sábado en la maratón de Tamarindo, donde Teresita se dejó el tercer lugar en la categoría de los 21 kilómetros.
El recuerdo de sus hijos fallecidos, Anthony y Natalie llevó a Arguedas a correr desde el 2013 la prueba de Tamarindo y este año la acompañó por primera vez su sobrina.
“Sé que al ver a Valeria, es como que Natalie estuviera aquí, porque estarían de la misma edad. También recuerdo por supuesto a mi hijo Anthony y a mi suegra Rosibel Bolaños Brenes, que murió tres días después. Mi hijos murieron cuando tenían cinco y tres años”, contó Arguedas Campos
Esta vecina de Heredia perdió a sus hijos el 27 de diciembre del 2007, en un accidente de tránsito ocurrido en el fatídico cruce con Villareal en Santa Cruz de Guanacaste.
Después de lograr el tercer lugar, Teresita se fue a esperar a su sobrina, al llegar Valeria, se fundieron en un abrazo y cruzaron la meta juntas, las lágrimas fueron inevitables.
Su carrera favorita
Después del fatal accidente, Teresita y su familia juraron no regresar por ese sector, pero el tiempo fue pasando y en el 2013 un amigo la convenció de participar en el atletismo y la valiente atleta tomó la decisión de entrarle a esta disciplina.
“Acepté el reto de participar, pero nadie me dijo que me llevarían a Tamarindo y cuando llegué cerré mis ojos y solo pensé que si Dios había decidido llevarme otra vez a dicho lugar era porque tenía algo hermoso para mí y me quedé y desde el 2013 la carrera de Tamarindo es mi preferida”, comentó Teresita.
La florense no olvida quienes la acompañaron en aquel primer viaje.
“En ese momento viajaron conmigo mi esposo Roy Salazar Bolaños, mi cuñado Manuel Salazar, mi hermano Daniel y mi amigo Alberto Ávila, ellos sí sabían para donde íbamos, pero no me dijeron hasta que llegamos porque venía dormida”, recordó Arguedas.
Desde hace dos años, cada vez más miembros de su familia la acompañan a la prueba y por ejemplo este sábado estuvieron 11 más junto a ella.
Tamarindo extranjero
La historia no cambió este sábado y la maratón de Tamarindo volvió a ser ganada por un extranjero por sexto año consecutivo.
La edición 12 arrancó desde las 4 de la mañana y tuvo al etíope Hunde Gezahegn como el gran ganador en la rama masculina con un tiempo de 02 horas 27 minutos y 47 segundos, con la participación de 2600 atletas.
En el año 2012, el atleta tico Deyner Sánchez, triunfó en dicha competencia, siendo hasta el momento el último tico en convertirse en el triunfador de la prueba.
En la segunda casilla se ubicó el tico Pedro Jesús Mora con 02 h. 28 m. 46 seg.
El tercer puesto se lo dejo el colombo Juan Carlos Cardona Ríos, con 02 h. 35 m. 39 seg.
En la rama femenina la ganadora fue la atleta colombiana Palmenia Agudelo, con 02 h. 57 m. 51 seg., seguida por la nacional Sofía Hjert con 03 h. 06 m. 16 seg. Y en tercera posición Annete Rodríguez, también tica, con 03 h. 23 m. 34 seg.
En el caso del etíope, su fuerte paso desde la salida marcó que sería difícil que algún otro competidor pudiera sacarle el primer lugar y poco a poco conforme los atletas sumaron kilómetros sobre el pavimento, Gezahegn supo como dosificar sus fuerzas para terminar de primero.
La colombiana Agudelo, se comportó de la misma forma y no ocultó que el clima también fue un rival a vencer.
“El clima estuvo fuerte y la ruta también, pero gracias a Dios la pude dominar para hacer una buena carrera. Prácticamente corrí sola toda la competencia, pero me sentí bien”, comentó Agudelo.
Aunque los ticos siguen sin poder ganar la maratón de Tamarindo, en otras distancias el triunfo sí llegó.
En un interesante duelo, César Lizano y el guatemalteco Carlos Trujillo, protagonizaron una fuerte batalla, sobre todo porque Trujillo llegó con la mira puesta en apearse la marca de la media maratón de 01:07:30 en poder del estadounidense Eric Fernández
Lizano y Trujillo en el propio banderazo de salida le pusieron piernas al asunto, sacandole ventaja al resto de sus rivales.
En los primeros metros de la carrera el chapín buscó como imponer su mandato, pero el tico supo como responder para no quedarse atrás.
El momento clave de la disputa se presentó en el cruce de Villarreal, cuando Lizano mojó las tenis y sacó una luz de ventaja de casi 500 metros.
Manejando de forma inteligente sus pasos Lizano logró quedarse con el primer lugar de los 21 kilómetros, deteniendo su cronómetro en 01 h. 09 m. 09 seg.
“Realmente me gusta correr acá, estoy haciendo las cosas bien, calladito, pero bien. Sabía mi ritmo y por dicha cuando cambié el paso pude mantenerme”, manifestó el ganador.
Por su parte Jenny Méndez corrió esta vez la media maratón y no los 42 kilómetros como lo venía haciendo, la tica-colombiana mostró mucha seguridad en la competencia, terminó como ganadora con 01 h. 21 m. 18 seg. En segundo lugar arribó Gabriela Traña.
“Debido a eso eran un poco nuevas las sensaciones, había que correr un poco más rápido, pero fue un exito gracias a Dios”, expresó Méndez
