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Costa Rica debería evitar los extremos en los que cayó en los dos duelos que registra ante Brasil en copas del mundo y apostar por una propuesta de mayor balance, es la lección que consideran dos futbolistas que enfrentaron a la verdeamarelha en la máxima cita del fútbol.
En 1990, la primera ocasión tica en un Mundial, tal vez el exceso de respeto hizo que la Sele no la Sele generara nada en ofensiva y prácticamente se dedicó a cuidar el marcador, propuesta que salió a medias porque a fin de cuentas perdimos 1-0, aunque las apuestas decían que los pentacampeones del mundo nos meterían 10.
Aquel 16 de junio de 1990, la Sele, a cargo de Belibor, "Bora" Milotinovic, se dedicó a aguantar la ofensiva brasileña, que no vio una salvó por un remate de Muller que se acabó desviando en la espalda de Mauricio Montero a los 33 minutos.
"Fue un jugada toda sin gracia, un saque de banda que metieron al área, nada planificado, nosotros la cabeceamos y despejamos y Muller entonces le pegó de fuera del área, yo salí a que me diera en un hombro y parar la pelota, entró la que menos tenía que entrar porque ese día Gabelo paró todo", explicó el Chunche.
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"Casi la mayoría de nosotros lo que pensábamos es como si estuviéremos jugando con el papá, en esa época nos dio mucho gusto jugar contra un equipo así, pero ahora ya nos hemos enfrentado varias veces en los mundiales y se va acabando ese respeto y ese miedo escénico de jugar ante una selección así", agregó Montero.
Mauricio recuerda aquel partido con mucho cariño por lo que significó para todo un grupo de futbolistas, al que a pesar de que respetaron mucho en el campo, nunca le tuvieron miedo.
"Sabíamos la clase de potencia qué era, estaba Careca, Muller, Alemao, estaba saliendo Bebeto, eran jugadores de mucho respeto, grandes campeones, era una ilusión jugar contra ellos, pero teníamos el pensamiento que tampoco eran más que nosotros. Sabíamos que si los pateábamos igual les iba a doler, no eran superhombres tampoco", destacó.
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Tanto fue así la cosa, que a pesar que no hicimos un tiro a marco en todo el partido, en un momento donde Careca le trató de armar un pleito a Héctor Marchena, el Chunche no le arrugó y enjachó a la estrella brasileña sin darle vueltas.
Conociendo como conoce a Óscar Ramírez, Montero piensa que Machillo apostará a un partido equilibrado.
"Va a buscar quitarle la pelota porque con ella son peligrosos, hacerle un muy buen bloque en zona y tratar de jugarle de pie a pie, no dársela al rival, defenderse con la bola es una estrategia porque así el rival no te puede atacar. El equilibrio de defensa-ataque puede marcar diferencia", dijo el Chunche.
Nos pasamos de foforones
En Corea Japón 2002, cuando volvimos al Mundial después de doce años de ausencia nos volvimos a topar al Scratch du oro y en esta ocasión más bien nos engolosinamos y nos pasamos de la cuenta en ofensiva y nos llevamos una goleada de 5-2 que nos eliminó.
Cuando el duelo iba 3-2 y tuvimos "sufriendo a Brasil" por unos momentos, era para aguantar y conformarnos con eso.
"Para nosotros fue una motivación enfrentarnos a un potencia así, nos tuvimos mucha confianza y no le tuvimos miedo para ir a atacarla, lástima que durante el partido no nos dimos cuenta que con el 3-2 estábamos clasificados, tal vez nos hubiéramos regulado más", reflexionó Harold Wallace quien disputó aquel duelo.
Aunque el marcador pueda decir misa, la verdad es que fue un partido muy emocionante, porque nos levantamos de un 3-0 a estar 3-2 con los pepinos de Ronald Gómez y Paulo Wanchope y con tufo a empate, rozando la hombrada. Pero cuando los brasileños, que ganaron su quinta Copa del Mundo aquel año, apretaron, nos llenaron el saco y nos dejaron sin nada.
"No le tuvimos miedo a enfrentarnos a Brasil y más bien en algún momento pudimos ser más cautos, pero reconozco que la emoción del momento nos ganó, sentir que estábamos jugando de esa manera nos hizo querer más, eso provocó que fuera un partido muy bonito, nombrado de los mejores del Mundial al final de la Copa", explicó el Rapero.
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Aquella vez, la Sele fue la única capaz de anotarle dos goles a los brasileños, selección que Harold cree se parece mucho a la que tiene actualmente, con muy buenos sustitutos.
"En vez de Ronaldo está Neymar, tiene a Marcelo en lugar de Roberto Carlos y a Dani Alves en lugar de Cafú, veo muy difícil que a Brasil se le escape algo, porque además al ser el segundo partido van a salir a buscar sellar la clasificación", destacó Wallace.
Su consejo a la Sele actual es que tengan equilibrio en la propuesta y cabeza fría para distinguir los momentos del partido para soñar en que la tercera sea la vencida.
