Una verdadera tragedia se está viviendo este sábado en Honduras como parte del previo entre el Olimpia y el Motagua donde las autoridades han informado que hay tres muertos.
El Motagua visitaba al Olimpia, pero el bus donde viajaba el equipo no llegó al estadio por un ataque que sufrieron y luego se armó una batalla campal entre aficionados de ambos equipos.
El presidente del Motagua, Pedro Atala, aseguró a través de redes sociales que tres jugadores de su equipo resultaron heridos, cuando aficionados del Olimpia atacaron a pedradas y botellazos el bus que trasladaba al equipo al Estadio Nacional de Tegucigalpa.
Los futbolistas Emilio Izaguirre (Honduras), Jonathan Rougier (Argentina) y Roberto Moreira (Paraguay) fueron atendidos brevemente en un hospital.
Según informa Diario Diez, siete personas han ingresado al hospital y se reportan tres aficionados fallecidos. El partido no se jugará.
Para tratar de dispersar a los revoltosos que se enfrentaban, la Policía lanzó gases lacrimógenos y eso hizo que los aficionados se lanzaran a la cancha, donde el caos de hizo mayor.
En un video compartido por el diario La Prensa se ve cómo incluso niños sufrían los efectos de los gases.
Más de 10.000 aficionados que estaban en las gradas y que intentaban salir por los portones fueron atacados por policías con bombas lacrimógenas para tratar de evitar más incidentes, pero durante la estampida resultaron las personas heridas.
"Nos tiraron botellas, piedras y los jugadores se tiraron al piso gritando", declaró a medios locales el entrenador argentino del Motagua, Diego Vásquez.
“Es lamentable que los aficionados lleguen a estos extremos”, deploró el presidente del Olimpia, Rafael Villeda.
El choque había sido declarado como de alto riesgo por la policía que había desplegado unos 5.000 agentes en anillos de seguridad dentro y fuera del estadio.