Puntarenas FC sigue siendo de los grandes protagonistas del Clausura 2025, al sumar una nueva victoria tras derrotar 2-0 a un Liberia flojito, que no tuvo para competirle a los naranjas.
El fútbol, en gran parte, es un estado de ánimo, de emociones, detalles trascendentales que marcan, sin duda, las temporadas en los equipos y eso es el Puerto, un equipo subido en una ola de motivación y ganas, que se siente con ganas de lograr cualquier cosa.
Tras nueve partidos suma 21 puntos, se ubica en el segundo lugar y de feria tiene un partido menos, ante Cartaginés, lo que quiere decir que tiene en sus manos la posibilidad de hasta ser líder. Según datos del estadígrafo Gerardo Coto Cover, este es el mejor arranque de torneo en la historia del PFC.
Ese ánimo se siente en el accionar de sus principales figuras, en la picardía y goles de Anthony Hernández, en las entradas por la banda y asistencias de Dariel Castrillo, el trabajo de carrilero de Kliver Gómez o en las bolas que sale a guindarse Leonel Moreira.
Los chuchequeros son un equipo con hambre, con fichas que quieren demostrar que todavía tienen mucha calidad y que en lugar de llegar a pelear un descenso, pulsearán llevarse una clasificación que no estaba en las quinielas de nadie.
A como juega Puntarenas, la manera cómo se comporta, centrarse mucho en el tema del descenso es quedarse en el periódico de ayer, con la victoria ya le saca ocho puntos a Santa Ana en el sótano, que si bien no es una distancia gigantesca, ya empieza a sentirse grande.
Ante los pamperos, el juego siempre fue de los locales, los que apostaron por la victoria, buscaron el marco y se llevaron con toda justicia los puntos.
El primero cayó apenas a los cinco minutos, una jugada de Dariel por la izquierda, tiró la asistencia al centro, donde entró Pika a definir, pero al final lo dieron como autogol a Johan Cortés, pues la tocó frente a marco.
Taquito, asistencia y gol. Doblete para Anthony Hernández 💥 pic.twitter.com/qgezRd3bP5
— Tigo Sports Costa Rica (@tigosports_cr) February 23, 2025
El otro fue una gran combinación, un lujo que se armaron entre Pika, quien recibió por la banda derecha, se la puso de taquito a Klíver, este se la devolvió de inmediato en una pared que rompió la zaga pampera y dejó a Hernández meterse al área para cruzar la pecosa de derecha.
Tuvo para más el Puerto, no se dio, pero sin duda es un equipo que cada vez juega mejor y hasta da show, de esos que gusta ver.