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En Liberia se adelantaron a los acontecimientos y antes que se les fueran arriba con Minor Díaz, lo renovaron hasta el 2027, pues sabían de antemano que equipos como Herediano estaban tras él.
Hace unas semanas, Jafet Soto, presidente florense, dijo abiertamente, que el técnico que quiere para su equipo es el de los pamperos, aunque respetaba que tuviera contrato con los aurinegros.
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Wilder Euse, jerarca de los coyotes, sin mencionar el nombre de Soto o su equipo, reconoció que detalles como esos los escucharon, pero que el motivo real de la decisión es mantener un proceso.
“Es algo que se habló en una rueda de prensa, abiertamente, pero que nosotros no le prestamos interés; respetamos mucho a todos los clubes de Costa Rica, pero nos interesamos en lo de nosotros, todos los días trabajamos en lo nuestro y, por eso, también tratamos que nuestros baluartes puedan quedarse más tiempo con Liberia”, comentó el dirigente.
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La cabeza de los pamperos dijo que además se quieren distinguir como un club que respeta procesos y marque un estilo diferente de trabajo, a diferencia de lo que se suele ver en otros lados, donde no tienen el mínimo de paciencia.
El 20 de octubre Minor cumple tres años con ellos, por lo que le dieron tres más para que se mantenga seis o el tiempo que sea necesario.
“Nos gustan los procesos, conocemos el trabajo del profe que es muy importante, trabajar así nos ha dado los resultados que hemos querido, el proceso ha ido madurando poco a poco como lo hemos planificado, es algo en lo que creemos”, añadió.
En el último año Liberia es el único equipo que en la primera división no ha hecho un cambio de banquillo y mantuvo un proceso. El que más se le acerca es San Carlos, que justamente, hace un año ratificó el regreso de Luis Marín.
