¿Se imaginan ver el clásico del buen fútbol entre Herediano y Saprissa o una de esas mejengas calientes entre el Team y Alajuelense, y al día siguiente tener una cita con el dentista, quien resulta ser nada menos que el técnico florense? Esa es la vida profesional de don Alexander Vargas.
El nuevo entrenador rojiamarillo es todo un apasionado del fútbol, ha trabajo mucho para llegar adonde está, pero tiene tan claro cómo es el deporte que por eso nunca ha dejado de lado su otra profesión como lo es la odontología, la cual ha sido su complemento perfecto.
A lo largo de su carrera en equipos como Guadalupe, Puntarenas FC, Carmelita y Guanacasteca siempre ha sacado tiempo para atender su consultorio y serle fiel a sus pacientes, situación que comentó a La Teja no tiene porqué cambiar dado que sabe balancear muy bien su tiempo entre ambas cosas.
“En todos los equipos que he estado ha sido igual, siempre les he dado todo, no le puedo faltar el respeto a ningún cuadro, yo trabajo en lo que es mi pasión, el hecho de llegar a Herediano, no quiere decir que ahora sí voy a trabajar más. Amo lo que hago, pero sé que siempre habrá espacio para poder atender a mis pacientes”
“Yo lo hago porque así me siento más útil por decirlo así, muchas veces me sirve para despejarme de muchas cosas y relajarme, porque en la vida no todo es fútbol”, destacó.
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Incluso después de llegar al campeón nacional, su trabajo como técnico le facilita las cosas, ya que su consultorio está en Belén. Además, nos confesó que con este cambio le ha aumentado la clientela.
“Es algo muy bonito, la verdad. Esa relación con el paciente es especial, y, para serle sincero, mi clientela más bien ha aumentado bastante. También es algo que me gusta mucho, porque, como le digo, me ayuda a desconectarme un poco. Además, tengo que pensar en mi familia y dedicarles tiempo. Amo todo lo que hago; siempre digo que quien no ama lo que hace es un desempleado más”.
La importancia del estudio y complementar el fútbol con otra carrera es algo que aprendió en su familia, otro motivo por el que siempre se mantiene haciendo las dos ocupaciones.
“No puedo ser irresponsable y dejar a mis pacientes botados, mi papá que en paz descanse siempre me lo pidió, siempre tuvo ese deseo y yo también quise, es algo que además saqué con mucho esfuerzo, por lo que no puedo dejar botada una profesión que me costó demasiado”, comentó.
Vargas ya se acostumbró a que la mayoría de personas que lleguen al consultorio le hablan de fútbol, pero a la hora de trabajar eso es lo de menos, si son florenses, manudos o morados, respeta a cada quien y nunca es de discutir.
“Siempre hay un espacio para hablar, obviamente que yo no voy a entrar en discusiones, polémicas, jamás ofender ni nada de eso, que todo sea con respeto, que en la cita el paciente también llegue, se recueste y se sienta súper cómodo para poder hacerle cualquier trabajo”, explicó.
Alexander Vargas siente muchísima ilusión
En el banquillo florense, Vargas siente muchísima ilusión, es un reto grandísimo en su carrera, dirigir al campeón nacional y a lo que apunta es a eso mismo, corresponder a la confianza que le brindaron.
“Primero que todo estoy muy agradecido con Dios por esta oportunidad, con Jafet y toda la directiva de Fuerza Herediana, pero tampoco puedo dejar de lado a toda la gente que me ha ayudado, a la presidencia de Guanacasteca, Guadalupe, Carmelita, Puntarenas y Sporting (en ligas menores) que me dieron la oportunidad de trabajar”
“Ahora vengo a un grupo adonde la exigencia es ser campeón, que siempre hay que estar en torneos internacionales, tengo mucha fe, mucha convicción que las cosas se harán de la mejor manera”, dijo.
El domingo ante Puntarenas FC será su debut en el banquillo florense adonde espera de una vez clavarle el diente a una oportunidad que estaba esperando desde hace mucho tiempo.