Aarón Suárez es de los jugadores de Alajuelense que siente nuevos aires en el cuadro manudo, diferencias que lo hacen pensar y ser muy optimista respecto al cierre del 2024.
El volante manudo habló con La Teja de manera muy sincera, reconoce que ve una vibra diferente hasta en la afición para levantar finalmente la ansiada 31 que es esquiva hace casi cuatro años.
¿Qué cree que hay en este ambiente diferente? ¿A qué se deberá? Porque en muchas ocasiones ha habido una situación similar a esta y la vibra en el aficionado hasta era diferente?, le preguntamos.
“Bueno, específicamente no sé en qué momento se dio, pero la verdad que sí se siente, se siente que tanto los jugadores como los aficionados estamos sobre la misma página, estamos sobre el mismo objetivo y eso nos ayuda muchísimo a nosotros como jugadores a poder lograr ese objetivo que todos queremos.
“Específicamente creo que este semestre ha sido distinto, ha sido un semestre donde el equipo ha tenido buena armonía, donde el club ha sabido llevar a los jugadores, también saber que todos los que estamos, los 26, estamos bien, todos estamos al cien para que el club nos ocupe. Entonces creo que hay muchos factores, tanto en la plantilla como en los aficionados, que están ayudando muchísimo para lograr el objetivo”, explicó.
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La llegada de Guima, su método de trabajo, la confianza que ha inyectado en la afición y su trayectoria es uno de los elementos que le consultamos si puede generar este optimismo.
“Puede ser que sí, porque Guima ha tenido una trayectoria grandísima, ha sido campeón en la liga colombiana también y creo que ha sabido llevar al equipo y lo más importante es que se han dado los resultados, que al final es lo que habla. Este semestre lo hemos respaldado con resultados, las cosas se han dado, los jugadores han rendido al máximo, todos estamos en buen nivel, en buen ritmo, que eso también nos ayuda muchísimo”, resaltó.
Para Aarón contar con un entrenador con el colmillo y la calma que transmite en momentos complejos es algo que contagia al jugador a mantenerse sereno. Una muestra de ello fue el miércoles en la final ante el Real Estelí cuando les anotaron al cierre y complicó las cosas un poco.
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“Sí, como usted lo dice, el mensaje, el lenguaje corporal del entrenador, de los jugadores, inclusive también es de la afición que a pesar de que nos anotaron, siempre siguieron cantando, apoyando hasta el final, que tal vez en situaciones pasadas no había ocurrido eso. Eso es una de las diferencias. Por eso digo que creo este semestre ha sido diferente, con buen ambiente y esperamos hacer las cosas de la mejor manera para poder sacar lo que nos resta”, agregó.
En la Liga la sensación es clara, sacar el título en cuatro partidos, sin enredos, es la meta.