La atleta costarricense Sandra Mejía se prepara para correr 320 kilómetros en la competencia llamada 200 millas de México Tras la Huella del Jaguar, una ultramaratón que verdaderamente es una rompepiernas.
El evento será del 26 al 29 de julio en Oaxaca, México y consiste en darle duro corriendo sin parar, salvo que el atleta quiera hacer una parada para dormir, descansar o comer algo, pero de lo contrario va seguido. Es una competencia solamente para personas que están muy bien preparadas y disciplinadas, con sus rutinas de entrenamiento y con una voluntad de hierro, como Mejía.
La costarricense quiere ganar la carrera y se siente en condiciones para terminar en el primer puesto.
“Me gustaría ganar el evento, pero hay muchos factores. En distancias tan largas pueden suceder muchas cosas, en enero fui a Brasil, 225 kilómetros, llegué bien, fui cuarta, pero tuve una lesión faltando 70 kilómetros que me hizo ir más despacio“.
“Mi expectativa es apuntar a tener una carrera de menos a más y tratar de ser muy eficiente con mi cuerpo, porque pese al cansancio, uno debe lograr que el cuerpo rinda bien, acorde al entrenamiento. No muy forzada ni lejos de la realidad del dolor”, indicó.
En esta ruda competencia, Mejía podría descansar, es una decisión de ella y para ello debe estar muy atenta a los signos que le dé el organismo.
“Son 320 kilómetros sin parar, con cortes de tiempo de 20 minutos a una hora para descansar, comer algo”, dijo.
Mejía tiene doce años de experiencia en este tipo de eventos y aunque son duros, definitivamente son su pasión.
Para lograr acostumbrar el cuerpo a esas competencias, Sandra entrena todos los días. Tres días haciendo fuerza en el gimnasio y los demás corriendo.
“Entreno en la mañana, pero a veces hago dobles sesiones, en la mañana y en la tarde”.
Cuando va a una larga distancia, como ahora, también lo hace en la noche.
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Sandra dice que la distribución de cargas en la semana debe ser muy equilibrada e inteligente.
“Una persona como yo, con diez años de correr en ultramaratones, tiene volumen en piernas y experiencia y son factores que ayudan. Ya lo que uno debe hacer es afinar detalles, si quiero ser más rápida toca hacer velocidad, si es prueba de más resistencia, hago montaña, pero generalmente la acumulación de kilómetros depende de las deficiencias. A la semana se pueden acumular 160 kilómetros”.
La atleta tica viajó a tierras aztecas desde el viernes pasado, con la intención de estar aclimatada a las condiciones que ofrecerá la ruda competencia.