Geovanni Vargas inició, en noviembre del 2005, un proyecto que ayudaría al desarrollo del fútbol femenino en el país.
Vargas y su mamá, doña Flor Delgado, crearon el proyecto de Dimas Escazú en la casa en la que vivían y casi 16 años después, el 24 de abril pasado, el técnico llegó a su partido número 300 como técnico del cuadro escazuceño.
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El DT ni siquiera sabía que había cumplido esa cantidad de juego al frente del club y más allá de la cifra, el llegar a los 300 partidos como cabeza de este proyecto lo hace recordar todo el esfuerzo que día a día le dedica a la institución.
Geovanni es administrador de empresas y cuenta con licencia A de entrenador.
El equipo femenino ascendió a primera división a finales del 2009 y a principios del 2010 debutó en la máxima categoría y en este momento es uno de los equipos que jugarán las semifinales del torneo de apertura.
Felicidad y retos
- ¿Qué representa cumplir 300 juegos a la cabeza de Dimas Escazú?
La verdad fue una sorpresa, porque no tenía el dato exacto de cuántos partidos llevo con el equipo, pero realmente me sentí contento porque considero que con el tiempo hemos logrado desarrollar un proyecto que nació desde cero y lo hemos podido sostener en el tiempo.
Cumplir una cantidad de partidos, con organización y mucho trabajo es muy importante, porque estamos ayudando al desarrollo del fútbol femenino en Costa Rica.
- ¿Cómo valora el proyecto que inició en el 2005?
A los 2 años de fundado el proyecto pensamos que había una posibilidad de sostener el proyecto, a pesar de que el fútbol femenino no le interesaba a casi nadie.
Personalmente visualicé a largo plazo la posibilidad de desarrollar un proyecto que impactara no solamente en Escazú, sino a nivel nacional, pensé que era una gran oportunidad y por eso me enfoqué en trabajar para sostenerlo en el tiempo.
- ¿Qué ha sido lo más difícil?
Lo más difícil es la parte económica, tener al equipo trabajando sin recursos es difícil, porque hay que ayudarle a una población de mujeres que quieren jugar bola, pero que no tenían apoyo y es complicado.
Conseguir recursos para el fútbol femenino hoy es una tarea pendiente, me parece que el lograr recursos económicos para el proyecto es la tarea mas difícil.
- ¿Hay algún partido que lo haya marcado?
Es una buena pregunta. No me ha marcado ningún partido, pero le podría decir que vivimos momentos muy complicados en el 2013. Estábamos en el último lugar y curiosamente fue con una generación de chiquillas que siguen hoy con el equipo, tenían 14 o 15 años y tenían una gran responsabilidad, porque perder este juego nos podría llevar al descenso y logramos ganar.
- ¿Qué le falta a Dimas Escazú?
El fútbol se mide por resultados y sin duda alguna nos falta ser campeones. En Dimas hemos logrado llegar a etapas finales en todas las categorías y tenemos un pendiente con la primera división, sin duda la más difícil, más ahora que los equipos son tan fuertes.
Tenemos que meternos en la final nacional y estando ahí conseguir el siguiente objetivo, la verdad sería muy aventurado decir cuándo lo vamos a lograr, pero trabajamos todos los días para hacerlo.
- ¿Qué tipo de ayuda le brindan a las jugadoras?
Nuestra planilla es de 25 jugadoras y tenemos un programa académico y la residencia, donde ayudamos a 10 jugadoras. A ellas les damos hospedaje, alimentación, asistencia médica, asistencia para estudiar, para que puedan terminar la secundaria.
A las demás jugadoras se les ayuda con viáticos y tenemos convenios con institutos de enseñanza de inglés y con clínicas.