Al finalizar el primer tiempo del juego entre Cartaginés y Alajuelense, doña Flory Zamora, la suegra de Michael Barrantes, se acercó a la capilla ubicada en el estadio Fello Meza para orar por el cuadro brumoso y por la salud de los jugadores.
Esta señora, de 75 años, fue a apoyar a su yerno al estuche, con su hija, María Andrea, la esposa de Michael; Arjen y Enzo, mis hijos del jugador y José, otro de sus hijos.
“Le pedí a Dios que ayudara a Cartago porque tiene muchos años de no ser campeón.
“Le pedí a la Virgencita que se acuerde de ellos y que ojalá no se lesione ningún jugador”, añadió la orgullosa suegra, quien llegó vestida de blanco y azul.
Doña Flory reconoció que Barrantes lucha hasta el final y por eso lo fueron a apoyar al estadio blanquiazul.