En el Día de la Independencia de Costa Rica, la Sele de futsal no pudo cumplir su misión de llevarse el triunfo ante Venezuela en el Mundial de Lituania, pues cayó 1-0, lo que complica mucho su futuro en el torneo.
Los ticos necesitaban al menos un empate y en la última fecha del grupo, el sábado ante Lituania a las 11 a.m, ganar para clasificar como segundo o mejor tercero con cuatro puntos.
Ahora, con la derrota, el único camino es buscar ser uno de los cuatro mejores terceros, pero la Tricolor prácticamente necesita un milagro ya que depende de los resultados de otros grupos el jueves y viernes, por lo que incluso podría quedar eliminada antes del sábado.
Por su parte, Venezuela con la victoria amarró su boleto a la segunda ronda al sumar seis puntos, los mismos que el líder del grupo Kazajistán, que a segunda hora derrotó 3-0 a Lituania y también clasificó a octavos.
Mejoría no alcanzó
Costa Rica pudo corregir algunas cosas del mal debut, cuando cayó 6-1 ante Kazajistán; sin embargo, no tuvo su mejor partido porque le costó mucho encontrar el camino al marco de los chamos, quienes aguantaron la presión de la nacional sin mayores sufrimientos.
Minor Cabalceta estuvo cerca de la anotación en un par de ocasiones, pero el arquero venezolano José Villalobos se interpuso en su camino, costaba mucho encontrar el camino para generar peligro.
A dos minutos del final del primer tiempo, en un contragolpe rápido que los sudamericanos armaron en tres pases, llegó el único gol del encuentro, Rafael Morillo cerró con un remate abajo del marco de César Vargas y así marcó el de la victoria.
Uno de los mayores sustos que pegó la Sele llegó faltando 53 segundos para el final de ese primer tiempo, cuando un remate de Edwin Cubillo por muy poco se fue al fondo de las redes, pero cuando la pecosa estaba por entrar, Morillo se tiró de jupa para sacarla un poco antes de tocar la línea.
La banca tica brincó pidiendo gol y hasta fueron a revisar la jugada con el video arbitraje para ver si había entrado, pero la repetición apagó la ilusión de los nacionales. El VAR debutó en el futsal en este torneo.
Para el segundo tiempo, los ticos la pulsearon, acabaron presionando el marco rival, pero no hubo forma de que la pecosa entrara, se intentó con diversas formaciones y estrategias.
El tiempo se convirtió en el peor enemigo de la Tricolor. En la recta final, el técnico Carlos Quirós echó mano de la figura de portero-jugador, un riesgo que se toma en estos casos para ganar peso ofensivo, más que el rival estaba echado atrás.
En esos minutos finales, el arquero César Vargas estuvo saliendo y entrando del campo, el rato que no estaba adentro, Edwin Cubillo se puso la chema de portero.
Lo malo de la Sele es que, como si fuera la selección mayor de fútbol once, no conseguía jugadas de peligro a marco, por lo que la posesión de la bola no le servía de mucho.
Tras el premundial en Guatemala, donde Costa Rica se proclamó tricampeón de Concacaf, las expectativas eran altas, especialistas hablaban que por el grupo era viable la clasificación, pero a la hora de los balazos, no cabe duda que son otros cien pesos.