EscucharSaprissa amarró el liderato en la fecha 22 del torneo y se aseguró una gran final en caso de no poder ganar la segunda fase, con un triunfo inobjetable ante Santos 3 a 1
La cima se consolidó no solo con el triunfo morado, sino que el Herediano, el único que podía arrebatársela, sufrió más de la cuenta ante Sporting, con el que empató a un gol, pese a que debía derrotarlo y esperar una caída morada. Era muy improbable.
Saprissa llegó como líder y los numeritos, la lógica y la historia indicaban que salvo un milagro, o un accidente de esos que a veces el deporte regala, debía terminar también en la cima.
Pero más allá de la cima, del liderato, de los partidos, lo más importante son las sensaciones que dejan los clasificados, qué tipo de imagen están dejando en la antesala de la etapa decisiva y lo del Team da pena.
El equipo se vino a pique, se ve sin hambre, sin calidad y de haber estado en disputa el segundo puesto, hubiera sufrido más de la cuenta. Es fácil entender por qué perdió doce puntos de diferencia.
Saprissa lo contrario. Fuerte, firme, con ambición, que mete miedo.
Ya en el primer tiempo, el asunto estaba más que resuelto. La escuadra morada derrotaba a Santos 2 a 0 y el Team caía en el Ernesto Rohrmoser ante Sporting, 1 a 0.
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El complemento ante esas circunstancias era un mero trámite, pues tenían que darse dos volteretas, realmente improbables, más la del Santos, que llegó con un planteamiento muy defensivo el cual se quebró con el primer gol morado.
Las cosas se movieron muy temprano, al minuto 21, con un penal a favor del Monstruo, que Mariano Torres convirtió en gol.
En ese momento, ya había mucha tranquilidad en los hombres de Vladimir, mientras que en el Ernesto Rohrmoser, Aarón Cruz, portero herediano, había evitado un golazo de Alejandro Reyes al minuto 12.
El Team jugó como sin hambre, haciendo un juego de tenencia del balón y de intentar algunos ataques. La más clara fue de Juan Miguel Basulto, a los 25 minutos, cuando cabeceó solo frente al marco de Adonis Pineda, pero botó el balón.
El Team pareció meterse un poco en el partido a la media hora, pero en el Ricardo Saprissa, Bryan Morales, el guardameta santista se hacía gigante para evitar más anotaciones y le hizo un par de paradones espectaculares a Javon East, quien lo enfrentó solo y a Orlando Sinclair, quien no lo pudo vencer con un certero cabezazo.
Y en lo mejor del Sapri, llegó el gol de Sporting, que ya teñía, al 35, la cima teñida de morado. Una gran jugada colectiva de los albinegros terminó en un pase de Dylan Ramírez al goleador del torneo, Steven Cárdenas, quien recepcionó dentro del área, se acomodó el balón y remató cruzado para vencer a Aarón Cruz.
Y Saprissa anotó el segundo antes de terminar el primer tiempo, con un tiro libre de Torres, que desvió Rigo Jiménez y se fue al fondo de los cordeles. El gol dio la sensación que lo había anotado el cubano Paradela, pero lo asignaron como autogol.
Y cuando en el complemento, el Team trataba de al menos empatar, Javon East anotaba el tercer gol al 50, luego de un centro de Joseph Mora por la izquierda que el jamaiquino bajó con el pecho y sin dejarla caer, la pegó de zurda, al otro palo. Un golazo.
Incluso, antes de cualquier reacción del Team, que intentaba e intentaba, pero sin mucha opción real, llegó el descuento de Santos, luego de un pase lejano de Jordan Smith a Jefferson Sánchez, quien controló el balón con la presión de Klíver Gómez, pero sostuvo la pelota y definió muy bien ante Kevin Chamorro.
Luego del 60, Saprissa empezó a jugar la semifinal, pues le dio minutos a hombres que requieren ritmo de juego ya que han tenido poca participación en los últimos encuentros por lesión o por expulsión, como Jefferson Brenes y Warren Madrigal. Luego metió a Kendall Waston.
Herediano también ensayó algunos cambios y en esa dinámica, uno de sus goleadores, que ingresó de cambio, Francisco Rodríguez, consiguió el empate al 76, luego de un entrevero en el área que logró definir solo frente al marco.
