Ronald Matarrita, lateral de la Tricolor, fue uno de los jugadores que provocó más gritos y piropos de las aficionadas que estuvieron este lunes por la tarde en el restaurante Burger King del parque de la Paz.
El futbolista asistió a un evento donde se presentaron los nuevos vasos mundialistas del restaurante de comida rápida. En el evento también estuvieron David Guzmán, Leonel Moreira, Patrick Pemberton, Johnny Acosta, Francisco Calvo y Giancarlo González.
A la actividad también invitaron a los exjugadores Wálter "Paté" Centeno y a Mauricio "Chunche" Montero.
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Los futbolistas llegaron después del almuerzo que tuvieron con el presidente Carlos Alvarado en Casa Presidencia, en Zapote.
Cuando le preguntamos a Matarrita sobre qué piensa del hecho de arrancar suspiros entre las fanáticas, se lo tomó con humor.
"Por dicha me ven medio lindo", dijo entre bromas el ramonense.
El lateral forma parte del equipo New York City de los Estados Unidos y reconoce ser coqueto, de los que le gusta vestirse bien y considera que tal vez sus ojos llaman mucho la atención de las mujeres y, en ocasiones, le piropean los tatuajes.
Ante la pregunta de si tiene novia, aseguró que no.
Pitazo de emoción
Ya en temas meramente deportivos, el joven de 23 años contó que cuando escuche el pitazo inicial en los juegos en Rusia, será el momento más emocionante de su vida.
"Por ahora no va nadie, decidimos entre la familia que yo iba a ir solo. Ellos prefieren quedarse en casa porque los matan los nervios", respondió a la pregunta de si algún familiar irá a suelo ruso a echarle porras.
A otro que le tocó atender rápidamente a la prensa fue al volante David Guzmán, del Portland Timbers, también de los Estados Unidos.
"Es el (viaje) que vale la pena porque todos tenemos una meta y en mi caso es ir al Mundial. Ha sido un largo camino, muy difícil, tengo que prepararme, hacer las cosas bien", señaló el jugador cuando se le cuestionó si de todos los viajes que ha hecho entre Norteamérica y nuestro país, este ha sido el más importante.
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Guzmán aseguró que no son conformistas y por eso quieren superar lo hecho por la Nacional hace cuatro años en Brasil. De hecho, contó que para el Mundial anterior, las lesiones le afectaron y le "agarró un poquito tarde", pero ahora se le están dando las cosas.
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El futbolista añadió que jugar en la MLS le ha ayudado a crecer y eso ha sido clave para poder subirse el avión a Rusia.
"Es un compromiso, vemos que el país está unido con nosotros, tenemos que dar el máximo", indicó el padre de dos hijos.