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En menos de 48 horas la locura de cientos de seguidores de Alajuelense desapareció por la derrota de 2-0 del miércoles por la noche ante Herediano, en el juego de ida de la final de la segunda ronda.
Los manudos se veían alzando la 30 el domingo en la Catedral, algo que todavía puede suceder, pero el entusiasmo ya no es el mismo entre la afición rojinegra.
La Teja se dio una vuelta este jueves antes del mediodía por las afueras del estadio Alejandro Morera Soto y un revendedor, con diez entradas en mano y el cual no se quiso identificar por su nombre, ni que le tomáramos una foto, dijo que la venta estaba mala.
“Está pésimo, muy malo. Hay mucho hermetismo, la gente no está llegando a comprar, nos estamos yendo por dentro porque nos quedamos con muchas entradas para el domingo”, dijo el revendedor.
El hombre agregó que los liguistas veían todo ganado, pero la derrota los enfrío y los que han llegado al estadio son socios a pagar la mensualidad.
“A comprar entradas nadie, en la mañana hubo algunos más revendores, pero como está tan malo se fueron, nadie está comprando entradas y es mucha la pérdida”, indicó.
Este señor aseguró que el resultado del miércoles en el Rosabal Cordero no se lo esperaba nadie, ni siquiera los seguidores del Team.
Aseguró que este jueves tampoco llegaron aficionados con entrada a intentar revenderlas, es decir, los que sí consiguieron seguro mantienen la fe de la remontada el domingo, a las 3 p.m., en La Catedral.
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Alajuelense cayó el miércoles ante el Herediano con un doblete de Francisco “El Divino” Rodríguez, ahora los manudos están obligados a ganar 2-0 para obligar a tiempos extra o penales.
En caso de triunfar 3-0, los rojinegros obtendrán la ansiada treinta que se les resiste desde diciembre del 2013.
