Tuvo que pasar un año y cinco meses para que Raúl Pinto, expresidente de Alajuelense, reconociera que se equivocó al despedir a Javier Delgado como entrenador rojinegro.
El Sheriff llegó a la Liga en diciembre del 2015, en sustitución del colombiano Hernán Torres, y llevó al equipo a la final del Verano 2016, luego de darle un baile a Saprissa en la semifinal.
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Sin embargo, Delgado perdió la final contra el Herediano, con global de 3-0, y aunque Pinto le había dado el apoyo, decidió quitarlo mientras el exdefensor estaba de vacaciones con su esposa en Estados Unidos, con motivo de sus 25 años de casados.
Pinto debió enviarle un mensaje de WhatsApp a Delgado pidiéndole que por favor lo llamara, ya que Repretel iba a dar el anuncio de su salida, y no querían que Javier se enterara que estaba despedido por otra vía que no fuera la oficial.
Delgado describió esa jugada como un golpe al corazón, ya que el equipo de sus amores es Alajuelense y había jalado del país con el apoyo y seguridad dada por Pinto, de que seguiría siendo el entrenador cuando regresara al país.
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Esa sucia jugada es algo que la afición no le perdona a Pinto y él mismo dice que hace unas semanas le pidió perdón a Javier por eso, algo que los manudos siguen pagando caro, porque luego trajeron a José Giacone, quien no aguantó y solo duró dos meses en el equipo.
Después llegó Guillerme Farinha, con el que terminaron terceros de la cuadrangular, y luego, la directiva comandada por Fernando Ocampo, contrató a Benito Floro y a Wílmer López, con los que no lograron pasar ni a la cuadrangular final.
Pinto quiso hablar del tema en una entrevista dada a La Teja el lunes de esta semana.
–Explíqueme, ¿por qué quitó a Javier Delgado del puesto de entrenador?
–Son cuestiones internas. Nosotros tuvimos una conversación en junta directiva con él, hay cosas que se comentaron y no estuvimos de acuerdo y por eso se quitó.
–Entonces, ¿por qué le dieron el apoyo luego de perder la final? Él se fue de viaje siendo el técnico y estando en Estados Unidos le avisaron que ya no iba a seguir.
–Es que viene esa conversación con él (Delgado), nos aclara ciertas cosas que estábamos con duda, no queda muy claro y tomamos la decisión de no contar con él.
–¿Por qué decidieron escoger a José Giacone como el sustituto?
–Había sido (Giacone) escogido dos veces como mejor entrenador del torneo y la oportunidad de que había una persona en junta directiva que era allegado a Giacone. Entonces por eso él viene a Liga Deportiva Alajuelense.
–¿Allegado en qué sentido?, ¿era un familiar de Giacone?
–No, un allegado. Tenía cierta amistad.
–¿Esa era la valoración que ustedes hacían para escoger un entrenador: que haya sido premiado en dos ocasiones como el mejor entrenador del torneo y que en la junta tuviera a algún conocido?
–Siempre nosotros... Había un consenso con la gerencia deportiva. Yo me acuerdo cuando me reuní con Víctor Badilla (que estaba entrando como gerente deportivo), le comenté la situación que pensaba con Delgado.
–¿Qué fue eso tan importante que pasó para quitar a Javier?
–Bueno, cuestiones internas de la institución.
–¿Tuvo bronca con algún jugador?
–No, fueron conceptos más que todo, de donde él valoraba a los jugadores y cómo creíamos nosotros que debió hacerse (jugarse) una final. Más que todo cuestiones muy técnicas que se valoran, pero que siempre, siempre, el gerente deportivo (en este caso Badilla) es el que nos da la luz de lo que tenemos que hacer.
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En ese momento, (para) Badilla la recomendación era cambiar (a Javier). Siempre fuimos muy respetuosos del cuerpo técnico y de la gerencia deportiva, porque son los que más saben de fútbol. Él (Víctor Badilla) siempre tomaba la última determinación.
–¿Usted considera que la crisis actual tiene que ver precisamente con tanto cambio de entrenador?
–Definitivamente hubo yerros por parte mía. Yo no puedo decirle al liguismo que Raúl Pinto nunca se equivocó.
Si usted me dice equivocaciones que tal vez cometí, es la salida de Javier Delgado.
Para mí, personalmente, fue un error haberlo quitado. La otra vez (hace más de un mes) me lo topé y le externé mis disculpas.
–¿No se habían visto desde que lo despidió (en mayo del 2016)?
–No, no nos habíamos visto. Fue en el Estadio Nacional, para uno de los juegos eliminatorios de la Selección . Siempre (Javier) como persona respetuosa. Son cosas que pasan y seguimos viviendo.
–¿Por qué ahora siente que fue un error?
–Tal vez porque el plan que se había hecho era desarrollarlo, tener más estabilidad dentro de la Liga. Un técnico necesita tiempo para desarrollar sus ideas y creo que por mi parte, no sé los demás compañeros de junta; sí fue un yerro.
–¿Cuál es otro error que usted cometió y que la Liga lo está pagando actualmente?
–No, ese es el único que siento. Tal vez con el mismo grupo hubiéramos llegado a otra final. En ese torneo (Invierno 2016) vi muy débil a Herediano y a Saprissa. Lástima que no mantuvimos en el proceso a la misma persona.