El nombre de Raúl Flores Hernández suena como el de una persona común y corriente. Muy pocos sabían, hasta este miércoles, que se trata de un poderoso jefe del narcotráfico a la altura de criminales como Joaquín "el Chapo" Guzmán, Ismael "el Mayo" Zambada y Nemesio Osegueda Cervantes, "el Mencho".
Las autoridades de Estados Unidos lo consideran el gran capo menos conocido y "un narcotraficante independiente".
Desde hace unos 40 años, el hombre nacido el 3 de julio 1952 en Guadalajura (Jalisco) se metió en el mundo del narcotráfico, en el que siempre ha tenido un perfil muy bajo. "El Tío", como se le apoda, no se casa con nadie, es decir, trabajaba con narcos que, incluso, son rivales. Bretea con el que le pague mejor.
Su nombre nunca salió en los noticieros ni era una leyenda del mundo criminal como el Chapo u otros narcos. Es como si de los delitos que cometía Flores nadie se hubiera enterado antes, la fama que parecen disfrutar otros jefes del narco a él no lo deslumbró.
LEA MÁS: Bronca narco sacaría de las canchas antes de tiempo a Rafael Márquez
Por sus negocios consiguió una fortuna de miles de millones de dólares en diversas empresas que conseguía a través de testaferros o prestanombres, es ahí donde el futbolista mexicano Rafael Marquéz salió embarrado.
Los gringos tienen un número estimado de cuánta plata tendría el Tío, pero no lo sueltan por los secretos de la investigación.
"Raúl Flores Hernández ha operado exitosamente por décadas debido a su larga relación con otros carteles de la droga y su utilización de testaferros financieros para enmascarar sus ganancias procedentes de la venta de drogas ilegales”, explicó John E. Smith, director de la Oficina de control de Activos Extranjeros de Estados Unidos (OFAC, por sus siglas en inglés).
Las autoridades tienen la versión que el Tío lleva unos 20 años de relación con Márquez y diez con el cantante de música banda Julión Álvarez, otro de los famosos involucrados en el grupo que, supuestamente, trabaja de cerca con Flores.
"Ambos hombres tienen largas relaciones con Flores Hernández y han servido como testaferros para él y su organización dedicada al narcotráfico y han tenido activos a su nombre” , señaló el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos este miércoles.
Flores está a la cabeza de un montón de empresas que recoge la siguiente imagen.
“Es extremadamente astuto en la manera de planear y en la manera de moverse entre carteles” , dijo Mike Vigil, exjefe de operaciones internacionales de la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA por sus iniciales en inglés) y autor del libro “Deal”.
En 2013, Flores entró a prisión por su probable responsabilidad en los delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita. Quedó libre en 2015 por falta de pruebas, de acuerdo con información de Notimex.
Él es Raúl Flores Hernández y así lo vincula EEUU con Rafa Márquez y Julión Álvarez. pic.twitter.com/wjc5xulJbl
— Univision Noticias (@UniNoticias) August 10, 2017
Desde julio está arrestado en un especie de prisión preventiva y lo trasladaron a una prisión de máxima seguridad mientras lo extraditan a los Estados Unidos.
En el mundo del fútbol fue dueño del club Guerreros de Autlán, con razón social del Club Deportivo Morumbí, el cual habría sido una de sus principales fuentes para el lavado de dinero. En 2008 dejó la presidencia del club de Liga de Ascenso en México y tiempo después el equipo desapareció.
Del equipo salieron jugadores que hoy juegan en equipos de la Primera División del campeonato mexicano. Flores también tuvo relación en algún momento con el Jaguares de Chiapas, que descendió de la Liga MX la temporada anterior.