Puntarenas es el nuevo líder del torneo, luego de conseguir un agónico empate ante Guanacasteca

Puntarenas y Guanacasteca tuvieron un duelo de grandes emociones y luego de verse contra las cuerdas, los chuchequeros consiguieron un agónico empate, que les permite asumir el liderato del Apertura 2024.

Los naranjas caían 2-1 contra la ADG; el juego estaba prácticamente cocinado, pero los porteños seguían presionando y una falta dentro del área de penal le dio un respiro a los puntarenenses y en el último suspiro, el colombiano Wilber Rentería apareció para marcar el tanto desde los once pasos y devolverle la sonrisa a sus compañeros y a la afición.

El 2-2 le ayuda al PFC a mantenerse en la cima, con 26 puntos. Detrás de él tiene al Herediano, que se quedó en el segundo puesto, luego de caer contra Alajuelense el sábado y mantiene su invicto, después de 7 victorias y 5 empates.

Atrás va quedando aquel Puntarenas, que el torneo pasado cerró con el descenso en su espalda y cuyos números dejaban al club en cuidados intensivos.

Al otro lado, en Guana tendrán que conformarse con el octavo lugar y con 13 puntos.

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“Me siento contento, feliz por el liderato, queríamos los 3 puntos, pero me quedo con la entrega de mis compañeros y hay que seguir peleando por los puestos de arriba”.

—  Wilber Rentería, jugador de Puntarenas.

Duelo caliente

José Pablo Córdoba, de Guanacasteca abrió muy rápido la cuenta para su equipo. El partido estaba calentando cuando el delantero nicoyano aprovechó un rebote en el área chica y al 3, la ADG llevaba la ventaja.

Los chorotegas celebraron por muy poco tiempo, porque tres minutos después aparecería Rentería para hacer el gol del empate. El 1-1 llegó de cabeza, tras un centro de Raheem Cole.

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Al 31, Alejandro Porras marcó el gol para los nicoyanos, luego de rematar en el área chica un centro de José Pablo Córdoba. El rival llevaba la delantera en el marcador, sin embargo, algunos aficionados de la ADG que llegaron al Lito Pérez manifestaron su sentir al entrenador José García y le pedían que se fuera.

En los últimos minutos, Alejandro Porras pasaría de ser el héroe al villano y cometió una falta dentro del área de penal que le costaría el partido a los guanacastecos.

El mediocampista envió al piso a John Paul Ruiz y el central Adrián Chinchilla revisó la jugada con lupa, porque reclamaban penal. En las gradas de la Olla Mágica el silencio era sepulcral, a la espera de una decisión.

Con la ayuda del VAR determinó que la falta era sancionable y de nuevo apareció Rentería, para marcar con fineza el gol que le daría la paridad y enviaría al equipo a la cima, al minuto 87.

La alegría fue total en el Lito Pérez y ahora, los naranjas acarician la cima. ¡El barco va que va!