En Costa Rica difícilmente exista un aficionado más fiebre a Liga Deportiva Alajuelense que Eduardo Herrera, más conocido como Pescado, el carismático y popular dueño del restaurante Jardín Cevichero Mexicano, en San Sebastián, San José.

En diversos programas deportivos radiales, Pescado ha demostrado su gran amor por la Liga y por eso es tan conocido.

Desafortunadamente, al famoso fiebre manudo dos derrames cerebrales lo tienen al borde de la muerte a sus 77 años, mientras que su familia y amigos se aferran a la esperanza.

El exárbitro Berny Ulloa se encontraba con Pescado el pasado domingo 8 de marzo, ya que ambos estaban en un bar tomándose una cervecita cuando Herrera empezó a dar signos de que no estaba bien a eso de las 5 p. m. Ulloa conversó con La Teja sobre lo sucedido.

"Estoy muy dolido por la situación que está viviendo mi buen amigo Eduardo, son más de 35 años de amistad y le tengo un gran cariño. Estábamos en un bar al que le gusta ir y lo noté muy callado, no me respondía nada, no sabía si se le había subido la presión o algo así, porque le preguntaba algo y no me hablaba.

“Ante esa situación le pedí a uno de los muchachos del bar que me ayudara a montarlo al carro para llevarlo a la casa y lo hice de inmediato. Al llegar, le dije a uno de sus hijos que Pescado estaba con algún problema físico”, explicó Ulloa.

En la casa lo subieron a una silla de ruedas y de una llamaron a la ambulancia que lo llevó al hospital Calderón Guardia donde lo atendieron y determinaron que había sufrido un derrame cerebral.

"El doctor cuando llegó al hospital dijo que había llegado justo a tiempo, fue algo muy extraño, a veces pasa lo que uno menos imagina. Él estaba bien cuando le sucedió eso, yo lo veo muy seguido y se veía bien.

“El lunes de la semana pasada, él estuvo sentado y los médicos dijeron que quedaría con problemas de habla, pero el miércoles de la semana pasada la situación se agravó, porque le dio otro paro cerebral y eso lo terminó de fregar. Lo intubaron y ayer la doctora habló con la familia para informarles que quedó en estado vegetal", destacó el exárbitro.

Duro momento

Don Berny contó que fue a visitarlo al hospital y que no pudo ni verlo cinco segundos, debido a la situación tan grave que atraviesa su amigo. Ulloa comentó que se siente muy dolido desde el día que Pescado se puso malito.

“Yo conocí a Eduardo desde que inauguró el restaurante y más que una amistad, tuvimos un relación de hermanos. Yo me sentaba con él a conversar y a tomar un fresco, antes íbamos más seguido, pero ahora uno se va haciendo más grande y deja de hacer cosas, ahorita iba todos los domingos, así que lo veía todas las semanas.

“Habíamos quedado que el día que todo pasó nos íbamos a tomar un par de cervezas y después se iría para la casa para ver el partido de Herediano y la Liga (3-3). Le gustaba ir más que todo para ver y hablar con los amigos, vacilar con el fútbol que es lo que le gustaba", contó el exsilbatero.

Ulloa explicó que al día siguiente uno de sus hijos le contó a Pescado cómo había terminado la mejenga y que mientras pudo conversar, siempre habló de la Liga.

“En los 35 años que tengo de conocer a Eduardo nunca he conocido a nadie más manudo que Eduardo, creo que estamos perdiendo al liguista número uno de este país, para él la Liga fue una parte muy importante de su vida”, comentó Ulloa.

Un detalle que don Berny aclaró fue que el estado de Herrera no tiene nada que ver con la epidemia del Covid-19, él no tenía gripe ni nada por el estilo, aunque tenía factores de riesgo como diabetes, ya que a él le habían amputado una pierna hace unos cuatro años.

“A él lo que le dio fue un derrame, no tiene nada que ver con este tema del coronavirus. Su familia ha estado con él siempre muy atenta o todo”, destacó.