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Tomás Fonseca, comentarista de Tigo Sports, nunca imaginó que viviría de cerca uno de los episodios más extraños y lamentables del fútbol argentino: la muerte de un aficionado en una gradería durante un partido.
Desde la ciudad de Buenos Aires, le contó a La Teja cómo, mientras el veía el partido de River Plate contra Defensa y Justicia desde la gradería Centenario baja (sector sur), vio como en la zona Sívori (norte) se dio el caos porque un aficionado perdió la vida cuando se cayó de la parte alta de la gradería a la parte baja, cuando la mejenga iba por el minuto 25 de la primera parte.
“Primero hubo un momento que la gente de la otra tribuna empezó a cantar “pará el partido”, y el árbitro paró el partido. Ahí se averiguaron qué había pasado y reanudaron el juego. Al rato se vio que al árbitro le dijeron por intercomunicador que parara el partido del todo y nosotros no entendíamos qué estaba pasando.
“A los pocos minutos se empezó a decir que una persona se habia muerto, que se había caído de la tribuna alta. Luego, a los 10 minutos anunciaron por los parlantes del estadio que el partido se suspendía. Los jugadores de River se acercaron a la gradería y saludaron, los rivales saludaron al árbitro y se fueron”, comentó.
En ese momento, Fonseca estaba acompañado por su papá Gabriel y su hermano Santiago, quienes son socios del club millonario desde hace años. Todos se mostraron sorprendidos por la situación y hasta que llegaron a su casa tuvieron más detalles de lo ocurrido.
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“Fue raro, pero a la vez tranquilos porque estábamos al otro lado. Algunos se mostraron enojados porque falleció en medio partido, otros estaban más tranquilos y estaban de acuerdo que lo suspendieran. Al final nos quedamos con el sinsabor de ‘qué extraño ir a un partido y que se suspenda porque alguien se murió’. Por un lado, queríamos ver el partido y, por el otro, empatizas con los familiares del señor”, indicó.
El comentarista tenía cerca de cinco años de no ver desde las gradas a su amado River, pero tras una situación familiar aprovechó el viaje para escaparse a ver la mejenga. Al final sólo disfrutó por unos minutos y estuvo de acuerdo en cómo reaccionaron las autoridades al suspenderlo de inmediato.
Medios locales indicaron que se están investigando las causas del hecho. El fallecido era un señor de 53 años y, por el momento, no hay una nueva fecha para la reanudación del juego.
