La diputada de la Unidad Social Cristiana María Inés Solís es dueña de un carrito que le pasan piropeando, aunque nunca lo ha llevado a la Asamblea Legislativa.
Se trata de Patricio, un Volkswagen modelo 1973, que tiene como locos a los legisladores que han visto sus fotos y que desean vivir la experiencia de darse una vuelta en esa preciosura de nave que la diputada solo lo anda en su natal San Carlos.
Patricio tiene su historia.
“Un día iba caminando por Rohrmoser y lo vi parqueado. Me gustó por lo que fui a tocar la puerta para ver si estaba en venta. Salió una señora muy elegante que me dijo que necesitaba hablar con el marido del asunto y me pidió que pasara al otro día”, cuenta la legisladora, que heredó el gusto por esa marca alemana de su padre, quien tiene un vocho y una vanagon.
La diputada fue al otro día y habló directamente con el señor, quien le hizo prácticamente una entrevista.
“Me preguntó; ¿dónde lo va a tener?, ¿qué va a hacer con él? En fin, me hizo una serie de preguntas, seguramente porque él lo atesoraba mucho. Al final llegamos a un acuerdo de precio y lo compré”, dijo María Inés, quien no dio cifras ni precisó la fecha de la compra.
Lo primero que hizo fue mandarlo en grúa a San Carlos, donde el tata, y empezar la restauración.
“Lo primero era arreglarlo mecánicamente, se le hizo un overhaul al motor, se le arreglaron las rótulas, los frenos y la instalación eléctrica. Fue un proceso largo y digamos que esa fue la primera parte. Luego lo llevé a Riteve en el 2019 y pasó a la primera”, explicó.
Pero faltaba. La diputada la puso al día con los marchamos atrasados y luego lo envió a otro taller en San Carlos para la reparación de la carrocería.
“Estuvo como mes y medio, ya había partes como con herrumbre y fue allí donde decidí si dejarle el color original o cambiarlo. El color original es verde y yo con algo verde… ni una blusa”, dijo.
Pero luego de pensarlo y de hacer varias encuestas con sus conocidos, la dipu decidió dejar el carrito con el verde original.
“Ahora estoy muy contenta, se ve lindísimo con el color original. Luego de eso lo llevé a otro lugar para ponerle tapicería nueva. Los sillones y el alfombrado”, dijo.
Ya con el chuzo como nuevo, la diputada empezó a rodarlo, pero solo en San Carlos pues dice que le da miedo que le falle si lo lleva a Chepe.
“Por ser viejo se le joden cosas. Si se daña se repara, pero esa fue la odisea en diciembre. Lo llevé a Riteve y se le pegó un freno y no pasó. Lo llevé a un taller, lo arreglaron y a la segunda pasó bien. Entonces, por eso fue que puse una foto (del carro) en redes”, dijo.
Gracias a esa imagen que ella publicó de Patricio, fue que La Teja le llegó al chuzo.
“Le puse Patricio porque me recuerda a san Patricio, el patrono de Irlanda y todo lo relacionado con los duendes”, dijo.
Varios diputados conocen a Patricio por fotos y le pasan diciendo que cuando lo lleve a San José les dé una vueltica.
“Tengo que llevarlo, pero no sé si en grúa o si manejándolo, pero fijo tendría que ir alguien en otro carro atrás”, explicó la diputada, quien todavía no está muy segura de las capacidades de Patricio.